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La preocupación crece entre los vecinos del reparto Sueño, en Santiago de Cuba, en la zona cercana al complejo deportivo de esa comunidad, porque de manera escalada y sin control estatal ha ido aumentando un basurero en un sitio donde, si bien siempre se acumulan los desechos sólidos, la actual situación de escasez de combustible hace desconfiar de una ágil y pronta solución.
El mismo temor tienen también los vecinos de Veguita de Galo, del reparto 30 de Noviembre, de Santa Bárbara y del Centro de la Ciudad, pues en todas estas barriadas de la urbe de Santiago de Cuba ha aumentado, de forma alarmante en las últimas semanas, la acumulación de desechos sólidos en las calles.
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El peligro no es solo los riesgos que acarrea la basura desperdigada en la calle, sino que, además, en los últimos días se hacen habituales los fuertes aguaceros que, junto a los desechos sólidos, traen como consecuencia la proliferación del mosquito transmisor de enfermedades como el dengue, el chikunguya y el zika.
“Es preocupante la acumulación de la basura en las calles, y que los carros de la basura no están pasando como antes, a veces ni vienen en días, y el problema es que una pone la bolsita con basura en un lugar y enseguida los demás ponen ahí mismo sus desechos y eso va creciendo y creciendo sin control y eso me tiene mal, mi hijo tuvo dengue, mi nieta tuvo que interrumpirse un embarazo por tener zika, veo que se está acumulando la basura sin control”, opina una vecina del 30 de noviembre.
“El basurero que está cerca del complejo deportivo Antonio Maceo afecta a un lugar que es frecuentado por niños, adolescentes, jóvenes y hasta por adultos mayores, van ahí a buscar salud, bienestar, pero no a exponerse a ser picados por un mosquito. Además, es una zona netamente residencial, con niños, personas mayores, hay gente y casas por donde quiera, no es un terreno baldío o muy poco habitado”, comenta un lugareño.
En este mismo microbasurero acuden personas que esperanzados por una solución, arrojan escombros, animales muertos, pomos, latas, desechos orgánicos etc., pues piensan que será recogido. Pero pasan los días, y la acumulación alcanza niveles sin precedentes, varios metros cúbicos de desechos.
Y mientras la lluvia cae todos los días, en ocasiones varias veces en menos de 24 horas, aumentan los mosquitos, y personas que ahora mismo no son imprescindibles en sus centros laborales son sumados a la campaña, junto a los estudiantes de medicinas.
“Hay transmisión de dengue en varios barrios de la ciudad, ahora mismo todo el que llegue con fiebre es casi un ingreso seguro, y se nos ha orientado hacer pesquisas, ir casa por casa, y verificar si alguien tiene fiebre y hasta sutilmente presionar a las personas para que acudan al hospital”, asegura un joven estudiante de medicina.
Comunales, la entidad encargada de solucionar los problemas de los desechos en la ciudad, asegura en un reporte periodístico en medio local que en la actual situación no se podrán cumplir los ciclos habituales de recogida de basura.
Señalaron, además, que entre las casi 40 medidas que se aplican está el uso de la tracción animal y la priorización de la recogida de desechos solo en arterias principales, zonas aledañas a parques, así como escuelas y hospitales.
Las mismas autoridades reconocen que tales alternativas resultan insuficientes para recoger los 3 mil metros cúbicos de desechos que se generan diariamente en la ciudad de Santiago de Cuba, los que abarcan escombros, ramas de árboles, entre otros.
Desde el rotativo local, en su versión digital, afirman que comunales ha reconocido que existen microbasurales, como el del 12 planta de Trocha, que ya son habituales y requieren equipos especiales que por la falta de combustible no podrán usarse.
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