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El Gran Maestro Lázaro Bruzón explota: "¿Cuándo vamos a plantearnos todos si ese es el país que queremos? "

El Gran Maestro cubano de ajedrez, considerado uno de los tres mejores trebejistas cubanos de todos los tiempos, publica un post directo al corazón de lo que vive la Cuba de hoy.

Lázaro Bruzón, Gran Maestro cubano de ajedrez © ACN
Lázaro Bruzón, Gran Maestro cubano de ajedrez Foto © ACN

Este artículo es de hace 4 años

El Gran Maestro cubano de ajedrez Lázaro Bruzón, considerado junto a Leinier Domínguez y el genio José Raúl Capablanca uno de los tres mejores ajedrecistas cubanos de todos los tiempos, ha explotado contra la situación que vive su país y lo ha hecho a través de un post que él mismo reconoce es de catarsis personal.

"La gota que colmó el vaso fue una conversación con alguien muy especial en mi vida. Hoy necesito hacer esta catarsis. Primeramente lo necesito para limpiar mi mente, para dormir bien, para soltar una carga pesada que llevo durante algún tiempo. También lo hago por si alguien le sirve y se puede identificar con mis palabras", comienza su publicación el Gran Maestro cubano, que desde hace año y medio reside en Estados Unidos.

"A veces pienso que no somos de un país llamado Cuba, sino del planeta Cuba y nosotros somos alienígenas. ¿Por qué todo lo que pasa con Cuba y los cubanos tiene que ser tan fuera de lo común? ¿Por qué cosas que deberían ser simples y lo son en cualquier parte del mundo se convierte en un caos total cuando se trata de Cuba?"

Facebook L'azaro Bruzón

"En mi opinión", prosigue Bruzón, "todos los cubanos de una forma u otra estamos muy afectados, cuando analizo la sociedad y como nos comportamos en las redes veo muchos sentimientos de frustración, odio, impotencia, agresividad y sobre todas las cosas temor, tenemos mucho temor. A veces no damos un like a una publicación por la repercusión, es enfermizo".

Luego de optar por integrar el equipo de la Universidad de Webster, Missouri, en julio de 2018, la Comisión Nacional de Ajedrez expulsó a Bruzón, quien en ese momento lideraba el ranking nacional y ya era considerado un ajedrecista de talla mundial.

"Por mucho tiempo estuve apartado de temas políticos, las razones pueden ser muchas, cada cual tiene que vivir su proceso y es lo que he hecho yo. Hoy, sin creerme el más patriota que nadie, quiero aportar mi granito de arena sobre los temas de cuba, dar mi opinión, con respeto pero sobre todo con toda mi sinceridad, de forma transparente."

"Por ese motivo", continúa su escrito el trebejista, "desde que llegue acá comencé a buscar toda la información posible para tratar de entender ciertas cosas relacionadas a nuestro país. Tenía ciertos conocimientos generales sobre algunos temas pero hasta ahí. Siendo una persona obsesiva como soy le he dedicado a eso cientos de horas, las suficiente para llegar a ciertas conclusiones que hoy me hacen ser crítico hacia el sistema y leyes en mi país."

"Una vez que asumes lo que es la libertad, el respeto a la opinión ajena y el hecho de tu poder dar una opinión sin ser cuestionado, nada vuelve a ser igual. No hay peor prisión que encerrar tus ideas por temor a las represalias que puedan tomar por el simple hecho de emitir un criterio. En ese sentido principalmente es que hoy no me da la ecuación de ninguna manera con lo que pasa en Cuba y el trato que se le da a las personas que piensan diferente."

Según el propio Gran Maestro, natural de la oriental ciudad de Holguín aunque vivió casi toda su vida en Las Tunas, la manipulación oficial sobre el tema de disidentes y activistas opositores le ha resultado particularmente chocante:

"Cuando antes escuchaba la palabra opositor, disidente, al momento venían acompañadas de adjetivos como mercenarios, enemigos, delincuentes y toda esa propaganda que por tanto tiempo nos han dicho. Hoy sé que hay mucha gente buena, gente de bien que luchan por sus derechos de forma cívica y son maltratados, encarcelados, los separan de su trabajo y le hacen la vida imposible por el simple hecho de no estar de acuerdo con el sistema que hay en Cuba. (Incluso para los que argumentan que hay muchos opositores lucrando con el tema de Cuba, eso no le resta fuerza ni verdad a su mensaje)."

El bombardeo de preguntas al que somete luego Bruzón a los lectores es revelador de esa catarsis que anunciaba desde el primer párrafo: "¿Hasta cuándo el gobierno cubano va a seguir poniendo la ideología por encima de la realidad objetiva de la nación cubana? ¿Acaso no ven lo que pasa? El descontento general, la cantidad de cubanos que se van y los que quieren emigrar a cualquier parte. ¿Acaso es tan complicado ver que no puede avanzar un país donde la prioridad en todos los ámbitos es la ideología y la propaganda? ¿Cuánto se gasta en actos y concentraciones masivas? En un país con tantos problemas económicos como el nuestro, ¿será eso lo que hace más falta? ¿Cuándo vamos todos a plantearnos de forma honesta si ese es el país que queremos realmente o si se puede mejorar, si podemos aspirar a algo mejor? ¿Cuáles son las esperanzas y sueños de los cubanos?"

De izq. a der. GM Yunieski Quesada, GM Leinier Domínguez, GM Lázaro Bruzón, GM Fidel Corrales.
Todos, radicados en Estados Unidos.

"No puede seguir pensando el pueblo que el culpable de todo es el bloqueo como nos han contado hasta ahora. No hay que llegar a la violencia para exigir tus derechos y oponerse a lo injusto. Reconocer que nos equivocamos, que hemos sido engañados es siempre difícil. Yo también puedo callar por conveniencia, la mayoría nos hacemos los de la vista gorda sabiendo lo que pasa a nuestro alrededor y solo actuamos cuando nos pisan los callos, pero hoy no lo puedo hacer."

"Soy uno más que se resiste a creer que no puede haber cosas mejores para todos los cubanos", prosigue Bruzón. "Nuestra nación necesita que haya más justicia, que todos seamos tratados por igual ante la ley, que se incluya a todos los cubanos en los proyectos de la nación, que se pueda vivir en paz a pesar de las diferencias ideológicas y desacuerdos políticos, que disentir no sea un delito, que no le prohíban la entrada a su país a cualquier cubano sin una razón de peso, que no le prohíban la salida de Cuba a un grupo de personas y la razón sea que están regulados por pensar diferente".

Para despejar dudas sobre las motivaciones que le llevaron a explotar de esta manera, el ajedrecista apuntó: "Que la sociedad y la mayoría de los cubanos puedan vivir de forma honesta con su salario. Que la Constitución de mi país no sea una sirvienta del Partido Comunista y margine al que no se identifica con ese sistema, eso no es correcto. Quiero aclarar que este es un mensaje positivo, de amor, un criterio personal, no hay nada ni nadie más que yo y mis pensamientos detrás de todo esto".

"Sé el peso de mis palabras y asumo las responsabilidades de mis actos. Una vez más repito que siempre estaré agradecido por todo lo positivo que me ha aportado mi país, pero no puedo callar lo que siento por ese agradecimiento eterno".

"Lo poco que yo pueda aportar o decir será en base al respeto y en busca de unión. El que se quiera alejar no hay ningún problema, ya lo han hecho varios y lo entiendo. El que me conoce de verdad sabe cómo yo soy, prefiero decepcionar a quien deba hacerlo siendo honesto y consecuente a seguir ocultando ciertas cosas para no herir a ciertas personas. Sobre todo seres muy queridos que no comparten mis ideas. Prefiero quitarme ciertas máscaras de una vez por todas".

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Ernesto Morales

Periodista de CiberCuba


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