Vídeos relacionados:
Beyoncé no es muy dada a hablar de su vida personal en entrevistas, pero el lanzamiento de su nueva colección de ropa ha sido una buena ocasión para hacerlo con la revista Elle, para la que protagonizará la portada de enero.
La estrella de la música se ha abierto en canal en esta entrevista hecha por sus fans -que le han hecho llegar sus preguntas a la publicación- en la que ha hablado de la maternidad y de cómo los abortos que sufrió antes de la llegada de su primera hija, Blue Ivy, le hicieron cambiar en todos los niveles.
Lo más leído hoy:
"Tener abortos involuntarios me enseñó que tenía que ser mi propia madre antes de ser la de otra persona. Luego tuve a Blue, y la búsqueda de mi propósito se hizo mucho más profunda", reveló la esposa de Jay-Z y madre de tres.
Este doloroso momento le hizo cambiar a todos los niveles hasta el punto de que el éxito y el ser reconocida pasaron a un segundo plano.
"La vida comenzó a enseñarme lecciones que no sabía que necesitaba, el éxito me parce diferente ahora”, explicó la cantante.
En la misma conversación, Queen B habló de las dificultades de la conciliación familiar, la cual llega a ser estresante para ella. "Me aseguro de estar presente para mis hijos. Dejar a Blue en el colegio, llevar a Runny y a Sir a sus actividades, tener tiempo para mis momentos con mi marido y llegar a tiempo a casa para cenar en familia. Todo mientras dirijo una empresa puede ser desafiante. Hacer malabares con todos esos roles puede ser estresante, pero creo que es la vida de cualquier madre trabajadora", señaló.
La llegada de la maternidad también supuso un gran cambio físico para Beyoncé, quien en un principio no lo llevó fácilmente. Incluso sus intentos por perder peso fueron drásticos y llevaron su cuerpo al límite. Pero con el paso del tiempo ha asimilado el cambio y se siente más segura que nunca de sí misma.
"Si alguien me hubiera dicho hace 15 años que mi cuerpo sufriría tantos cambios y fluctuaciones y que me sentiría más femenina y seguro con mis curvas, no me lo habría creído. Los niños y la madurez me han enseñado a valorarme más allá de mi apariencia física", reflexionó.
Archivado en: