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La Aduana General de la República (AGR) de Cuba confirmó que en 2019 un incremento de los intentos de introducir productos que promueven el consumo de drogas, fundamentalmente de marihuana, cuyo consumo en la región ha aumentado debido a la tendencia en varias naciones a la legalización de su uso.
En conferencia de prensa los expertos aclararon que existe una diversidad de orígenes y rutas empleadas, así como de formas de enmascaramiento del producto, pues se emplea tanto el cuerpo humano como diferentes objetos que se incluyen en los equipajes de los viajeros.
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En los hechos detectados se observó una mayor implicación de extranjeros, y de estos, predominaron las mujeres que ingirieron la droga, la ocultaron en alguna cavidad de su cuerpo o la adhirieron a este.
Las cantidades que trataron de introducir estuvieron en el rango entre los 300 gramos y 1 kilogramo, con predominio de la cocaína, aunque también se reportaron casos de marihuana y canabinoides sintéticos.
Hubo vuelos en los que viajaba más de una persona involucrada en el tráfico, pues venían como garantes de las operaciones. También se descubrieron alijos enviados en paquetería y en la modalidad de encomiendas desde Estados Unidos.
Según los especialistas, el enfrentamiento al tráfico de estupefacientes alcanzó una alta complejidad en este año, debido al incremento sostenido de su producción y su consumo en la región, a las diversas rutas de negocios y las formas de enmascararlos.
Hasta noviembre pasado la Aduana había frustrado 30 operaciones de tráfico de cocaína, marihuana y cannabinoides sintéticos, en las que se incautaron 21 kilogramos de estas sustancias, informó Moraima Rodríguez Nuviola, directora del Departamento de Enfrentamiento de la institución.
La funcionaria explicó que se percibe un incremento de operaciones de narcotráfico hacia Cuba, principalmente por vía aérea. Específicamente desde Estados Unidos se detectó un aumento de cannabinoides sintéticos.
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