Los vecinos de un viejo edificio de la calle Galiano, en Centro Habana, vivieron una de las experiencias más tristes que pueda tener un habitante de la Ciudad Maravilla: el derrumbe de su propia vivienda.
Los detalles de lo acontecido este sábado en la capital cubana los publicó en Facebook Sonia López, que recibió la noticia a través de su hermano y, según narra, el apartamento que queda justo encima del que vive su familia se desplomó.
"No hubo muertos y mi madre estaba con mi hermano", dice Sonia en la publicación. Detalla que algunos funcionarios públicos han tratado de "justificar lo injustificable" y, además, les dicen a los damnificados que mienten cuando aseguran que desde 1975 existe una orden de sacar a la familia de allí y ubicarla en un albergue por las malas condiciones de edificio, algo de lo que López dice tener pruebas.
Pudo saberse también que la familia recibió durante todos estos años "falsas esperanzas" y promesas de reparación y mudanza. "Al final nunca hicieron nada", asegura a la vez que se lamenta del incidente en el que no hubo que lamentar muertos ni heridos.
Los derrumbes en La Habana son frecuentes, sobre todo luego de algún fenómeno meteorológico que ocasione lluvias y fuertes vientos. Estructuras deterioradas, sin mantenimiento, y con hacinamiento provocan que se vengan abajo las viviendas. Lo peor es que el Gobierno hace poco por solucionar el problema y destina los recursos a la rehabilitación de espacios en el centro histórico de La Habana para construir hoteles, mientras las casas se caen en pedazos.
En Playa se conoció del derrumbe de una vivienda, que dejó heridas a varias personas de gravedad.
Sin embargo, no solo las viviendas sufren problemas de la misma índole. También instalaciones estatales y gastronómicas presentan daños y destrucción de sus estructuras, como el famoso restaurante La Carreta, en el céntrico Vedado, que muestra en su entrada un cartel advirtiendo el peligro ante el inminente derrumbe del local.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: