La censura en la Televisión Cubana del beso final entre dos jóvenes homosexuales en la película Love Simon, transmitida en el espacio televisivo "Pensando en 3D", ha generado un aluvión de críticas en las últimas horas.
La indignación del colectivo LGTBI+ ante lo sucedido desencadenó la convocatoria de una besada pública frente al ICRT para este domingo, a la 1pm (hora local).
“Nada nuevo, en verdad, pero no por ello menos preocupante, pues acusa lo lejos que estamos de poder disfrutar de una programación televisiva diversa e inclusiva en materia de identidades sexuales y de género”, escribió Maikel José Rodríguez Calviño en una extensa reflexión publicada en Facebook.
Rodríguez Calviño califica lo sucedido de “ejercicio de violencia simbólica que pone en desventaja ciertas orientaciones sexuales constantemente invisibilizadas y, por consiguiente, rechazadas, con respecto a otras, heteronormativas, 'correctas', institucionalizadas”.
Además de una falta de respeto al filme, a sus realizadores y a los televidentes, lo sucedido sería muestra, en su opinión, de “un claro acto de intolerancia que, a estas alturas, sólo evidencia una incultura tan profunda como preocupante”.
“Propongo a los directores de la parrilla televisiva que, en lo adelante, mutilen también todas las escenas de sexo heterosexual que cunden en las películas del sábado y las telenovelas; escenas que cosifican a la mujer y muestran al héroe masculino como el macho man y el campeón en la cama, a la que ninguna se le resiste”, concluye.
“Lo que censuraron no fue un simple beso. Fue el beso entre un adolescente blanco gay y un adolescente negro, gay y judío”, escribió por su parte el activista Yadiel Cepero.
“El ICRT censuró el beso final de la película Love Simon. Convocatoria de besada contra el odio para este 1 de marzo a la 1pm frente al ICRT. Comparte y suma a todos los que puedas, el amor no se esconde", reza el texto que se ha viralizado en las últimas horas como respuesta al nuevo acto de censura televisiva.
No es la primera vez que la homofobia institucional genera como respuesta la convocatoria de una besada pública. En mayo de 2019, varios activistas de la Comunidad LGBTI+ cubana respondieron con una "besada" en el Parque Central a la represión ejercida por parte del gobierno cubano a la marcha alternativa realizada en La Habana.
Besos y abrazos públicos siguen siendo respuesta para defender el derecho a la diversidad en un país donde la sexualidad libre ha sido (y por lo visto sigue siendo) reprimida.
También ratifica un NO a la censura, rasgo institucionalizado por el gobierno cubano en todas las esferas, como evidencian la expulsión de Andy Vázquez de Vivir del Cuento, o la reciente censura en la Muestra Joven de cine.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: