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Son en total 229 los colaboradores médicos cubanos que llegaron a Qatar desde el pasado 15 de abril para apoyar la contención del coronavirus en ese país, enviados por el régimen de La Habana.
Hasta el momento, el gobierno cubano no había declarado una cifra exacta de los cooperantes, pero una publicación del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) reveló el martes el dato.
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“229 colaboradores, entre enfermeros, médicos y especialistas llegaron a la península arábiga a petición del Gobierno de Qatar con el objetivo de prestar atención de carácter solidario a pacientes infectados por Covid-19”, señala el Minrex en Twitter.
En una nota anterior, el ministerio había expuesto que eran más de 200 médicos y enfermeros de la Brigada Henry Reeve los que llegaban a Qatar.
“A ello habría que añadirle los 500 profesionales del Hospital Cubano de Dukhan, convertido desde hace varios días en Centro Hospitalario para la atención de enfermos de la COVID19”, explica.
El Dr. Abdullatif al Khal, Copresidente del Comité Nacional de Preparación para Pandemias, destacó los acuerdos y las experiencias con colaboradores cubanos, dando así el visto bueno para su incorporación a la lucha por frenar la propagación del coronavirus en ese territorio.
Qatar ha confirmado 12.564 casos de coronavirus y 10 fallecidos por el brote originado en la ciudad china de Wuhan, de acuerdo con las cifras de la Universidad Johns Hopkins.
En ese país, los colaboradores fueron recibidos por el Dr. Mohamed Almarri, director ejecutivo del Hospital Cubano de Dukhan y jefe del Punto Focal para la Cooperación con Cuba para combatir la Covid-19, apuntan medios de prensa oficialistas.
Asimismo, se informó que los galenos antillanos comenzarían a ejercer sus labores luego de un breve periodo de cuarentena.
Las misiones internacionalistas cubanas han sido criticadas no solo como una herramienta política del régimen, sino como una forma de explotación para los profesionales de la salud formados en la isla.
Un reportaje el diario The Guardian publicado en 2019, exponía que la dictadura cubana se quedaba con el 90% del salario de los médicos que colaboraban en Qatar. La publicación indicaba que cobraban poco más de 1000 dólares, lo cual representa, aproximadamente, el 10 por ciento de lo que otros profesionales extranjeros ganarían trabajando en hospitales del gobierno en esa nación árabe.
En contraste, fuentes consultadas por el diario revelaron que el gobierno qatarí pagaba a La Habana "entre cinco mil y 10 mil dólares al mes por cada profesional médico".
Estas colaboraciones han servido largamente al régimen cubano para obtener ingresos, siendo la exportación de servicios una de las principales actividades económicas, junto al turismo, pero este último se ha visto seriamente diezmado por las regulaciones internacionales de viajes frente a la pandemia del coronavirus.
En ocasiones anteriores, las autoridades cubanas han asegurado que cuentan con las capacidades de instalaciones y personal para encarar la situación epidémica que atraviesa hoy el archipiélago por el Sars-Cov-2, incluso si el escenario empeorara.
Es una afirmación que, de cierto modo, bien podría justificar que el gobierno continúe enviando colaboradores médicos a misiones internacionales, aunque algunas voces lo cataloguen como una "situación de servidumbre" que viola normas mundiales.
Las autoridades del Ministerio de Salud Pública reportan que Cuba acumula hasta este miércoles 1467 personas con coronavirus y 58 que han fallecido desde que se diagnosticara el primer infectado. Se mantienen 790 casos activos y 617 se han recuperado.
Este miércoles, el director nacional de Epidemiología, Dr. Francisco Durán García, añadió que hay 3068 pacientes ingresados en hospitales y otras 6.839 personas se vigilan en sus hogares desde la Atención Primaria de Salud.
De los 1467 pacientes diagnosticados, 776 presentan una evolución clínica estable. En las últimas 24 horas se reportaron 30 nuevos casos, cuya totalidad corresponde a ciudadanos cubanos. De ellos, 23 estuvieron en contacto con otros casos confirmados y en siete no se precisa la fuente de infección.
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