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Un grupo de manifestantes norteamericanos destruyó una estatua de Albert Pike, el único monumento confederado de Washington, DC, mientras la policía se mantuvo al margen del suceso, lo que provocó una reacción en Twitter del presidente Donald Trump.
La periodista del Washington Post, Perry Stein, publicó varios videos en los que se ve a un grupo de manifestantes en la capital norteamericana derribando la estatua y prendiéndole fuego, mientras la policía observada de cerca los incidentes.
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El incidente provocó que Trump reaccionara en las redes sociales y criticara a la policía por permitir la destrucción de ese monumento.
“La policía de DC no está haciendo su trabajo mientras observan cómo se destruye y quema una estatua. Estas personas deben ser arrestadas de inmediato. ¡Una desgracia para nuestro país!", dijo.
El derrumbe de la estatua de Albert Pike no es algo nuevo. En 1992 un grupo de ciudadanos colocó sábanas blancas sobre la figura para llamar la atención sobre su supuesta membresía al KKK. En el 2017 la alcalde de la ciudad, Muriel Bowser, se manifestó a favor de su eliminación.
“En todo el sur, las ciudades están eliminando estatuas al aire libre de líderes confederados. Aquí, en la capital de la nación, hay uno en terrenos del Servicio de Parques Nacionales. Creemos que el Servicio de Parques Nacionales debería quitar la estatua de Pike y buscar la opinión pública sobre qué figura histórica debería reemplazarla ”, dijo en ese entonces LaToya Foster, secretaria de prensa de Bowser.
Tras la muerte del afroamericano George Floyd luego de ser detenido de forma violenta por un policía de Minneapolis, se ha desatado en todo el país una ola de protestas sin precedentes. Muchas de ellas han sido pacíficas pero otras se han convertido en actos de vandalismo y violencia entre diferentes sectores de la población.
Sobre las estatuas de confederados, la presidenta de la Cámara Baja de los Estados Unidos, Nancy Pelosi, solicitó que se eliminaran 11 estatuas que se encuentran en el Capitolio de ese país en apoyo a las protestas por la muerte de George Floyd y contra el racismo y la brutalidad policial.
"Las estatuas que llenan los pasillos del Congreso deberían reflejar nuestros ideales más altos como estadounidenses. Hoy, una vez más, pido que se retiren del Capitolio de los Estados Unidos las 11 estatuas que representan a los soldados y funcionarios confederados. Estas estatuas rinden homenaje al odio, no a la herencia", señaló en Twitter.
Sin embargo, otras estatuas, como una de Cristóbal Colón en Richmond, Virginia, también han sido derribadas, y en este caso el momumento al descubridor del Nuevo Mundo terminó en un lago, luego de ser pintada y envuelta en una bandera norteamericana en llamas.
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