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El gobierno de La Habana adelantó que todavía no se ha decidido si el 30 de septiembre la capital regresará o no a la normalidad, tras las medidas adopatadas para frenar la propagación del coronavirus.
Por el momento se mantienen vigentes todas las medidas adoptadas por las autoridades, incluidas las elevadas multas a quienes incumplan alguna de las normativas.
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Luis Antonio Torres Iríbar, presidente del Consejo de Defensa Provincial, explicó este fin de semana que la decisión se tomará "tras profundas valoraciones multisectoriales, en las cuales primará el criterio médico-sanitario-epidemiológico, por encima de cualquier otro", según un reporte del periódico Tribuna de La Habana.
La aclaración ocurre luego que el Consejo de Ministros aprobara el Decreto 14, en vigor desde el pasado 1 de septiembre, donde se limitó la movilidad dentro de la ciudad y se impusieron multas de hasta 3 mil pesos a personas naturales o jurídicas, con el fin de evitar que aumenten los contagios.
La dispersión de la enfermedad en cada municipio de La Habana y la existencia de eventos de transmisión local (con más de 10 contagios) hace que junto a Ciego de Ávila, ese sea uno de los territorios con mayores complejidades en el control de los focos.
Hasta el último informe del Ministerio de Salud Pública de Cuba (sábado 12 de la noche), en La Habana se habían diagnosticado un total de 3 190 personas con el COVID-19, con una tasa de infección de 19.38 por cada cien mil habitantes en los últimos 15 días.
En el parte oficial de este domingo el MINSAP informó de otros 30 casos solo en La Habana (de los 45 anunciados en todo el país).
En otro encuentro, las autoridades de La Habana declararon que desde el 1 de septiembre se habían impuesto más de 15 mil multas a personas naturales o jurídicas y el 61 por ciento habían sido pagadas. Eso representa unos 17 millones de pesos en menos de 30 días. Los municipios de Habana Vieja y La Lisa son los que más atrasos tienen en este sentido, explicó la prensa oficialista.
Aunque los expertos coinciden en que limitar la movilidad, el uso de medios de protección individual, el distanciamiento personal y la higiene de las manos son algunos de los elementos claves para evitar la propagación del nuevo coronavirus, la ciudadanía considera que las medidas aplicadas muchas veces son arbitrarias y excesivas.
En este medio se han denunciado casos de ciudadanos cubanos que alegan no estar de acuerdo con las multas impuestas, porque se encontraban en la calle con el objetivo de comprar alimentos u otros productos de primera necesidad. En el municipio Playa un habanero grabó el momento en que fue conducido a una estación de la Policía para ser multado porque estaba en la vía pública. Aunque el hombre alegó todo el tiempo que pretendía comprar en un kiosko en CUC fue sancionado por la PNR.
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