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Miguel Álvarez Sánchez, quien durante dos décadas fuera secretario del expresidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, falleció en La Habana como consecuencia del cáncer que padecía.
Álvarez cumplía una condena de 30 años por espionaje en una cárcel cubana, pero a comienzos de octubre -a instancias de numerosas gestiones de su familia- el gobierno cubano le otorgó una licencia extrapenal por su delicado estado de salud.
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La noticia del fallecimiento ha sido dada a conocer en Facebook por el cantautor cubano, Frank Delgado, quien es allegado a la familia.
"Buen viaje mi querido papá joven. EPD Miguel Álvarez", escribió el músico cubano, que acompañó su mensaje de varias fotos y de un mensaje cariñoso para los miembros de la familia.
Los tres hijos de Miguel Álvarez -Noel, Mauricio y Maylen- viven en México, y a finales de octubre viajaron a La Habana para despedirse de su padre.
Miguel Álvarez Sánchez -antiguo oficial de la inteligencia cubana- fue arrestado en marzo de 2012 junto a su esposa, Mercedes Arce, también agente de inteligencia, y ambos fueron condenados en diciembre de 2013 a 30 y 15 años de prisión, respectivamente.
Según los tribunales cubanos, Miguel Álvarez, quien hasta su arresto era un reconocido analista en política estadounidense y consultado con frecuencia por la televisión estatal, le pasaba información secreta a su esposa, quien posteriormente la vendía a compañías privadas en México. La prensa oficialista jamás divulgó nada durante el proceso penal seguido contra el matrimonio.
A finales de septiembre de este año, uno de los hijos de Miguel Álvarez dio a conocer en las redes sociales que su padre estaba muriendo, y dijo estar convencido de que ambos eran inocentes de los cargos que el gobierno cubano les imputó en un oscuro proceso judicial.
Noel Álvarez dijo que "el juicio fue secreto, un juicio militar para que nadie pudiera cuestionar", y lo definió como un "proceso donde no se presentaba prueba alguna sobre la culpabilidad de los acusados".
"Ellos no sólo nunca han reconocido, ni han aceptado, ninguna de las acusaciones que les hicieron, sino que todo el tiempo hemos estado apelando según lo permite la ley cubana", subrayó.
La posterior noticia de la licencia extrapenal otorgada al exasesor del que fuera uno de los hombres más influyentes de Cuba en los años 90, generó numerosas reacciones entre los cubanos.
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