El músico y activista cubano Denis Solís, quien fue arrestado en la Isla el pasado 9 de noviembre, declaró desde la cárcel que había sido víctima de una golpiza por agentes de la Seguridad del Estado y que le querían borrar sus tatuajes.
CiberCuba tuvo acceso a una grabación que contiene la llamada telefónica entre Solís y un familiar, donde el joven de 31 años relata que, además de los golpes recibidos, lo han amenazado con desalojar a su familia de la casa donde viven en la calle Paula de La Habana Vieja.
El joven rapero contestatario tiene tatuadas en el pecho frases que dicen Cambio Cuba, las cuales quieren eliminarle del cuerpo los agentes al servicio del régimen castrista.
Denos Solís aseguró, además, haber recibido amenazas de que lo iban a desterrar del país.
Aunque algunas partes de la grabación resultan inentendibles, se logra escuchar que en Valle Grande, la cárcel donde está el músico, hay una gran insalubridad.
Desde que Denis Solís fuera detenido saliendo de su casa por un presunto delito de “desacato”, varios artistas y activistas por los derechos humanos en Cuba se han sumado a exigir su liberación.
Por su parte, el Movimiento San Isidro (MSI) difundió un un comunicado en el que denunciaron que la detención de Solís se hizo de manera violenta, y que “como ya es habitual en estos casos políticos, no le permitieron hacer ninguna llamada a su familia. En cambio, oficiales de la Seguridad del Estado fueron a su casa en dos ocasiones para intimidar a sus familiares y llevarse el teléfono de Denis. Incurrieron así en múltiples violaciones: no respetaron la inviolabilidad del domicilio, hicieron un registro sin orden y sin testigos, y se llevaron unos zapatos de Denis sin levantar un acta de ocupación”.
El pasado sábado un grupo de opositores, casi todos miembros del Movimiento San Isidro, amaneció frente a la Unidad de Policía de Cuba y Chacón, en La Habana Vieja, para protestar por la represión en la Isla y exigir la liberación de Solís, quien ha sido condenado a 8 meses de privación de libertad en un juicio celebrado por el Tribunal Municipal de La Habana Vieja al día siguiente de su arresto.
Varios de los activistas que se han manifestado también han resultado detenidos, como es el caso de la escritora Katherine Bisquet, la reportera de CiberCuba Iliana Hernández y el artista Luis Manuel Otero Alcántara, la curadora de arte Anamely Ramos, el rapero Maykel "Osorbo" Castillo y el activista Esteban Rodríguez.
Otras acciones se han llevado a cabo para demandar el arresto arbitrario del joven rapero, tales como la entrega de un Habeas Corpus ante el Tribunal Provincial de la Habana, o la convocatoria a una lectura masiva de poesía en apoyo a la causa de Solís.
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