El activista de la Unión Patriótica de Cuba, Diosbani Zalazar Rodríguez, exigió a las autoridades de la isla la inmediata liberación de su hijo, de tan solo 18 años de edad, que fue detenido por un delito que asegura no cometió.
A través de las redes sociales Lidier Hernández Sotolongo, miembro del grupo Somos +, compartió un video donde Zalazar Rodríguez narra lo sucedido.
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Zalazar Rodríguez, residente en la oriental provincia de Guantánamo, contó que el pasado 3 de diciembre su hijo fue al campo de tiro de una unidad militar y pidió permiso para entrar a recoger uno de sus animales y coincidió que había un soldado rompiendo una estructura para extraer las cabillas con algún objetivo que desconoce.
Según el activista de la UNPACU a ese joven lo detuvieron de manera violenta mientras que a su hijo lo acusaron de ser cómplice de lo que sucedía.
"Mi hijo no sabe nada de eso", dice, sin embargo.
Tras estos hechos, el joven de 18 años fue citado en la Unidad de Prevención de las FAR en Guantánamo donde estuvo detenido 5 días "sin comer", según la versión del padre.
"El día 14 entregó un habeas corpus y el día 15 lo trasladaron para el Combinado sin tener delito", dijo Zalazar Rodríguez, quien se mostró preocupado por la integridad de su hijo al estar "en un lugar tan peligroso".
El joven tiene algunos problemas de salud, explicó el activista, que le impiden cumplir el Servicio Militar, obligatorio en Cuba para los hombres mayores de 18 años.
"Por eso estoy acusando al Gobierno de los Castro, para que el mundo vea lo que hacen. Ellos hablan de derechos humanos, se plantan en reuniones y dicen que no violan los derechos humanos pero uno no puede decir lo que siente", agregó.
Diosbani Zalazar Rodríguez ha sido multado en dos oportunidades por infringir el decreto ley 370, un mecanismo de represión criticado por grupos de la sociedad civil y organismos internacionales por ir en contra de la libertad de expresión.
En el artículo 68, inciso i) de esa polémica regulación, se estipula que es un delito publicar "información contraria al interés social, la moral, las buenas costumbres y la integridad de las personas", y por tanto se usa contra activistas y opositores para intentar silenciarlos o disuadirlos de sus acciones contestarias o de denuncias.
"Me han multado con 3 mil pesos por expresar lo que siento, por decir lo que veo, me han soltado en el monte y me han torturado psicológicamente. Eso es el Gobierno de los Castro y yo exijo que liberen a mi hijo ya", expresó en una ocasión.
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