Estados Unidos vuelve al Consejo de Derechos Humanos de la ONU

La medida revierte una decisión de la anterior administración, que abandonó ese organismo de la ONU en 2018

 Joe Biden y Antony Blinken © Twitter / Secretary Antony Blinken
Joe Biden y Antony Blinken Foto © Twitter / Secretary Antony Blinken

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El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, anunció este lunes que su país se reincorpora al Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas

La medida revierte una decisión de la anterior administración, que abandonó ese organismo de la ONU en 2018, y se corresponde con las acciones del presidente demócrata Joe Biden de retornar a organizaciones y pactos multilaterales.


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El mandatario ordenó a su secretario de Estado "volver a comprometerse de forma inmediata y firme" con el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, según reportó en su portal web la cadena CBS News.

El inquilino de la Casa Blanca pretende centrar su política exterior en la democracia, los derechos humanos y la igualdad con el uso de herramientas multilaterales, explicó Blinken.

"Cuando funciona bien, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU destaca a los países con los peores antecedentes en materia de derechos humanos y puede servir como un faro para quienes luchan contra la injusticia y la tiranía", dijo Blinken en Twitter. "Por eso Estados Unidos está de vuelta en la mesa", agregó.

El funcionario estadounidense también reconoció que "el Consejo de Derechos Humanos tiene fallas y necesita reformas, pero alejarse no lo solucionará".

"La mejor manera de mejorar el Consejo, para que pueda alcanzar su potencial, es a través de un liderazgo estadounidense sólido y con principios", resaltó.

Estados Unidos abandonó el CDH de la ONU hace dos años tras criticar que ese grupo de 47 países mantiene como socios a Cuba o Venezuela, violadores de los derechos humanos, mientras ataca a Israel, un aliado de la nación norteamericana.

La entonces embajadora norteamericana ante la ONU, Nikki Haley, calificó al organismo internacional de "hipócrita y egoísta".

En octubre último se eligió a Cuba como uno de sus países miembros, lo que generó una ola de protestas de activistas, opositores y defensores de los derechos humanos.

“Nos preocupa profundamente la decisión de otorgarle a Cuba una nueva oportunidad para ocupar un puesto en el Consejo de Derechos Humanos. Esto no solo recompensa el pobre historial de Cuba en materia de derechos humanos, sino que también socava la integridad del Consejo para responsabilizar a los gobiernos abusivos por sus acciones en la región y en todo el mundo”, enunció una declaración firmada por más de 85 representantes de la sociedad civil cubana y medios de prensa independientes.

La organización UN Watch, con sede en Ginebra, se alzó en contra del anuncio y alertó que más de la mitad de los 47 países que conforman el grupo no cumplen con los estándares mínimos de una democracia libre.

Otras voces en contra de la inclusión de Cuba en el CDH de la ONU partieron desde la Administración Trump. El secretario de Estado, Mike Pompeo usó esto como argumento para demostrar que el abandono del grupo multilateral no había sido un error.

"La elección de China, Rusia y Cuba para el Consejo de Derechos Humanos de la ONU valida la decisión de Estados Unidos de retirarse del Consejo en 2018 y utilizar otros espacios para proteger y promover los derechos humanos universales", declaró Pompeo.

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