La activista y académica cubana Omara Ruiz Urquiola se reunió el pasado martes con una de las voces más notables de la oposición en el exilio, Rosa María Payá.
En el encuentro que tuvo lugar en una de las playas de Florida, ambas mujeres compartieron lo que Ruiz Urquiola llamó “una obsesión” en común: Cuba.
Urquiola, quien se vio imposibilitada de volar a Estados Unidos para recibir un tratamiento de cáncer producto de una desactualización en sus pasaporte, arribó al país norteño el pasado fin de semana, según confirmó su hermano, el biólogo Ariel Ruíz Urquiola:
¡Me dejaron abordar el avión!”, le comunicó Omara a su hermana vía telefónica.
Rosa María Paya, hija del prominente opositor cubano Oswaldo Payá, ha dedicado su carrera en el ámbito político al activismo en función de generar democracias en la isla. Es fundadora del movimiento cívico Cuba Decide y vocera de la Coalición Democracia, Libertad, Justicia y Renovación Política. Además, ha denunciado los atropellos de la dictadura frente a la Organización de Estados Americanos y en otras instancias internacionales.
Por su parte, Omara Ruíz Urquiola formó parte del claustro académico del Instituto Superior de Diseño (ISDi), hasta que fue expulsada de este centro en 2019 tras 20 años de servicio. La exprofesora indicó, en aquella ocasión, que su despido estaba asociado a una persecución política que las autoridades habían emprendido contra ella y su hermano.
"Me quedo en la calle, sin salario, y además truncan una parte de mi vida importante que es la enseñanza", comentó en entrevista a Radio Martí luego de la expulsión.
Durante los últimos meses de 2020, Ruíz Urquiola participó activamente en uno de los episodios que marcaron el epicentro de la crisis política del país: la huelga de Damas 955. Aunque Omara no se sometió a la huelga, sí estuvo acuartelada junto al resto de los activistas prestando su servicio.
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