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El activista cubano Esteban Rodríguez mostró en sus redes sociales la imagen de una citación policial que recibió su esposa para presentarse en la estación de Cuba y Chacón, en La Habana Vieja, en la que se aprecia claramente una falta de ortografía.
En la citación, a nombre de Zuleidis Gómez Cepero, el Ministerio del Interior la apercibe de que si no acude podrá ser acusada por el delito de "DESOVEDIENCIA", escrito incluso en mayúsculas.
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No se trata de un nuevo delito del Código Penal, sino una muestra del escaso nivel cultural que tienen los oficiales del orden en Cuba, lo cual tampoco sorprende a nadie.
No es la primera vez que representantes del gobierno cubano dejan ver su falta de preparación.
En noviembre pasado, el primer ministro Manuel Marrero publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que escribió 'sensillez' en lugar de 'sencillez'.
Incluso la cuenta oficial de la Presidencia de Cuba tuiteó en una ocasión las palabras 'maniobras' y 'alrededor' con errores, al escribir "despliegue y 'mamiobras' (sic)" y "territorios 'alrrededor' (sic)".
INTIMIDACIÓN DE LA SEGURIDAD DEL ESTADO A FAMILIARES DE ACTIVISTAS
Es una práctica común de la Seguridad del Estado realizar acciones intimidatorias hacia los familiares de los activistas por la democracia y los opositores, para hacerlos desistir de su lucha contra el régimen.
"Citan a mi esposa para mañana en la unidad de Cuba y Chacón. Dejen el invento con mi familia", dijo Esteban Rodríguez, uno de los huelguistas de San Isidro, tras recibir el citatorio a nombre de su esposa.
Zuleidis Gómez Cepero comparte las ideas de su esposo y al igual que él ha sufrido arrestos arbitrarios por su posición política en contra del régimen.
El pasado 14 de febrero la policía la detuvo y le impuso una multa de 2.000 pesos, cuando salió en defensa de un grupo de seis madres de La Habana que fueron desalojadas violentamente de un local estatal, en estado ruinoso, que había ocupado para vender productos de elaboración propia y de esa forma aliviar un poco su pobreza.
"Mil gracias por todas esas personas que se preocuparon por mí y las demás madres. Ya estamos en casa multadas cada una de nosotras con una cifra de 2000 mil cup. Me pregunto de dónde madres solteras con problemas económicos van a poder pagar esa suma de dinero", publicó en su Facebook.
A comienzos de mes la periodista María Antonieta Colunga, quien trabaja en la organización católica Cáritas Cuba, fue interrogada por agentes represivos acerca del trabajo de su esposo, el periodista independiente Yoe Suárez.
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