El Banco Central de Cuba (BCC) advirtió a la población que con la tasa oficial del dólar en la isla las personas van a perder dinero.
La advertencia del BCC llegó a inicios de marzo, a través de su cuenta oficial en Twitter, donde recordaban a la población que "para el envío de transferencias entre tarjetas en moneda libremente convertible (MLC) es necesario comprobar que el número de la tarjeta de destino comience con 9225" pues de lo contrario se estaría enviando el dinero a una cuenta en moneda nacional.
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En tales casos el BCC sugiere no hacer la transferencia ya que al enviar el dinero a una tarjeta en CUP se convertiría el monto mediante el cambio de 1 x 24, que es el establecido oficialmente por el Estado desde que se inició la unificación monetaria. Es decir por cada dólar enviado se recibirían solo 24 pesos cubanos.
Esta tasa de cambio no es reversible, es decir, nadie puede actualmente en Cuba comprar un dólar en el banco por 24 pesos cubanos. Las entidades bancarias del país aseguran no tener dinero para vender a la población, a pesar de mantener su tasa de cambio fijada oficialmente desde el pasado 1ro de enero que comenzó la tarea de unificación monetaria.
Las transacciones se hacen en el mercado informal. Desde inicio de la "tarea de ordenamiento" el peso cubano se ha ido depreciando contra el dólar y otras monedas fuertes como el Euro. En la página de anuncios clasificados Revolico hay ofertas de ventas de dólares por 50 pesos cubanos (CUP), y otros que cambian euros por hasta 55 y 56 CUP.
El BCC reconoce que el cambio de la moneda en la calle es mucho más alto y alerta a la población de que si venden esos dólares al Estado perderán dinero.
Al inicio de la "Tarea Ordenamiento", el Gobierno cubano indicó que en algún momento las personas podrían ir a las Casas de Cambio a comprar un dólar por 24 pesos cubanos, pero han pasado ya tres meses y ese momento no llega.
Tener divisas en Cuba es cada vez más necesario pues no están a la venta en CUP los insumos de primera necesidad para la población. El aumento de salarios y la escasez de productos en pesos cubanos que solo pueden adquirirse en las nuevas tiendas en divisas contribuyen a la devaluación de la moneda nacional.
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