El científico y activista cubano Oscar Casanella mostró a los cansados agentes de la Seguridad del Estado que lo vigilan “día y noche” desde fuera de la casa de su madre en Nuevo Vedado, La Habana, según compartió en un video transmitido por CiberCuba.
Casanella lleva siendo vigilado sin poder salir de su casa durante los largos 4 días en los que ha transcurrido el VIII Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC), una práctica represiva que se ha extendido a una buena parte de los activistas cubanos por estas fechas.
El científico mostró a uno de los agentes que lo vigila dormido en el portal de la casa de enfrente, donde reside un empresario español que Casanella denunció que ha colaborado con sus represores.
En adición, el video muestra tres motos de agentes de la Seguridad parqueadas frente al domicilio donde se encuentra sitiado Casanella, pero solo uno de ellos sale en el video.
“Ellos también están cansados”, dijo Casanella, quien explicó que los represores se turnan en dos tiempos para vigilarlo y que una “motico” les trae merienda, además de explicar que los gendarmes permanecen hasta por la madrugada después del toque de queda decretado por el Covid-19.
El activista, a quien Etecsa le ha cortado las comunicaciones de su número de teléfono durante estos días, dijo también que varios vecinos de la vigilancia frente a su casa, lo que ha constituido un inconveniente para el barrio.
El sitio de Casanella forma parte de una extensa operación represiva que mantiene secuestrado a artivistas como Luis Manuel Otero, después de que su casa fuera allanada por paramilitares que rompieron sus obras de arte y se lo llevaron a la fuerza, y ha retenido a la fuerza al rapero Maykel Osorbo en una casa en Lawton.
Además, ha incomunicado y vigilado a más de una decena de activistas, artistas y periodistas independientes, entre los que se cuentan la periodista Luz Escobar, la artista Camila Lobón o la poeta Katherine Bisquet.
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