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Organizaciones y activistas de la sociedad civil cubana en el exilio convocaron una manifestación el próximo miércoles 23 de junio frente a la sede de Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, para exigir la libertad de los presos políticos.
“Convocamos a todos los cubanos y cubanas que puedan asistir a este evento de denuncia y reconciliación, porque Cuba es la manera a través de la cual nos explicamos al mundo. ¡Libertad para los presos políticos!”, dijo el escritor cubano Carlos Manuel Álvarez en un post publicado en su página de Facebook.
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El evento, convocado por S.O.S. Cuba y Proactivo Miami se celebrará frente a Naciones Unidas desde las 10 de la mañana.
“En medio de una crisis económica y sanitaria y una escasez material imparable, hay algo en Cuba que aumenta: el número de presos políticos y los castigos ejemplarizantes contra los eventos de desobediencia civil”, aseguró Álvarez en su publicación.
Para el periodista, recientemente laureado con el Premio Don Quijote de Periodismo en España, “la represión policial agudiza las contradicciones de clase, la desigualdad social y el carácter racista de un Estado centralizado que practica con sus ciudadanos constantes y a la vez muy variadas formas de violencia política”.
El catálogo de actos represivos del régimen cubano, explica Álvarez, incluye la “vigilancia, adoctrinamiento, castigos laborales, detenciones aleatorias, interrogatorios, desabastecimientos, cárcel, fracturas arbitrarias entre la vida nacional y la riqueza cultural de su diáspora”, entre otras prácticas.
Esta situación llevó a un “grupo de cubanos en el exilio” a convocar una manifestación frente a la sede de la ONU “para visibilizar la situación injusta que atraviesan los activistas y ciudadanos que deciden ejercer su libertad individual y oponerse al status quo vigente en la isla”.
“No vamos a parar hasta que todos los presos políticos en Cuba sean liberados y consigamos un estado democrático que represente, respete y defienda a todos los cubanos del mundo”, expresó en sus redes sociales Tomás Castellanos Núñez, haciéndose eco de la manifestación convocada, en la que se pide un futuro sin más presos políticos en Cuba.
Por su parte, Álvarez recordó la historia que enlaza la ciudad de Nueva York con Cuba, que se remonta al período colonial en el que patriotas como José Martí o Félix Varela conocieron el destierro.
“Nueva York no es una ciudad ajena a la idea de Cuba, sino una plaza que (…) permitió imaginar la ficción de un país propio, el horizonte de posibilidades de una nación próspera todavía inconclusa, que de una vez tenemos que construir”, consideró el joven intelectual.
A comienzos de junio, una manifestación convocada frente a la Embajada de Cuba en Washington aglutinó a decenas de cubanos que exigieron libertad para Cuba y especialmente para los presos políticos.
Con pancartas, música y proyecciones contra la fachada del inmueble, los cubanos visibilizaron ante los diplomáticos del régimen la existencia de prisioneros de conciencia en Cuba, así como el incremento de la represión contra activistas pacíficos de la sociedad civil que solo reclaman el derecho a tener derechos.
Entre las banderolas desplegadas destacaban varias que exigían la liberación de los manifestantes de la calle Obispo.
Asimismo, también se exigió la libertad para Denis Solís, Luis Robles y Maykel Osorbo, junto a la de otros activistas y opositores encarcelados, tales como Adrian Coroneaux, Yoandi Montiel “el Gato de Cuba”, Adrián Góngora y Yeilis Torres Cruz, entre otros.
La sociedad civil cubana en el exilio ha experimentado un auge en su movilización ante la problemática realidad cubana. Cada vez son más las manifestaciones y protestas convocadas por cubanos en países por todo el mundo.
A raíz del asedio y la represión sufrida por los activistas del Movimiento San Isidro durante la huelga de hambre y sed realizada por varios de ellos en noviembre pasado, un grupo de cubanos se congregó frente a la Misión Permanente de Cuba ante Naciones Unidas, también en Nueva York, para protestar por la violencia de Estado que ejercía el régimen contra ellos, sus acompañantes, familiares y amigos.
“El silencio mata. Libertad para Cuba”, rezaba una de las pancartas enarbolada frente a la Misión Permanente. Este 23 de junio, frente a la sede de la ONU, la sociedad civil cubana en el exilio volverá a demostrar su compromiso con el cambio y futuro democrático de Cuba.
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