El Departamento de Estado de EE.UU. aseguró este miércoles que sigue de cerca las protestas pacíficas en Cuba por la libertad y derechos humanos.
“Elogiamos al pueblo de Cuba por mostrar gran valentía, su fuerza de voluntad y el poder de su voz”, dijo Ned Price, portavoz del Departamento de Estado.
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Price expuso que lo cubanos “están enfrentándose al régimen autoritario de Cuba. Sus necesidades básicas no están siendo atendidas y están agotados como es comprensible”
Igual volvió a mostrar preocupación por la reacción que el gobierno de Díaz-Canel ha dado ante estas manifestaciones pacíficas.
“En respuesta, el gobierno de Cuba ha intentado silenciar sus voces y comunicaciones, mediante cortes del servicio de Internet, violencia y detenciones arbitrarias de decenas de manifestantes, periodistas, activistas y otras tácticas represivas”, expuso Price.
El portavoz aseguró además que su gobierno sigue “preocupado profundamente por el ‘llamado al combate’ del gobierno cubano y las imágenes de violencia que hemos visto en los últimos días”.
Price reiteró que EE. UU. hace un “llamado a la calma”, además de que condenan “cualquier acto de violencia contra aquellos que protestan pacíficamente”.
Igual insistió en que el gobierno de Cuba debe liberar a todos los detenidos por protestar de forma pacífica en las últimas jornadas.
También este miércoles trascendió que las protestas del 11J, podrían tener un “impacto” en el curso de las relaciones entre los gobiernos de Washington y La Habana.
Según la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psak, se sigue "revisando" la política hacia Cuba y que cualquier modificación buscará "incentivar un cambio de comportamiento" del gobierno cubano, tras las históricas manifestaciones de este domingo.
“Seguimos revisando nuestra política hacia Cuba, fijándonos en su impacto en el bienestar político y económico del pueblo cubano”, dijo Psaki en rueda de prensa.
Afirmó que “no hay duda de que las protestas del fin de semana y lo ocurrido en los últimos días han sido acontecimientos significativos” y eso, “obviamente, tendrá un impacto" en la decisión que tome Washington sobre "cómo proceder” y apoyar la promoción de la “democracia y los derechos humanos” en la isla.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, expresó también este lunes su solidaridad con los manifestantes. También hizo un llamado al gobierno de Díaz-Canel “para que se abstenga de la violencia en sus intentos de silenciar la voz del pueblo de Cuba”.
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