La reportera de CiberCuba Iliana Hernández denunció en sus redes sociales que se encontraba sitiada por la Seguridad del Estado.
"Si yo salgo de mi casa ese hombre que está de rojo viene con los policías y me secuestra, si me resisto por ser ilegal me hacen una llave o me dan golpes, ya lo han hecho y me entran a la fuerza en la patrulla" comentó junto a un vídeo en el que se ven dos patrullas en plena calle y uno de los represores cerca de su vivienda.
"Y dice Díaz-Canel que los violentos somos nosotros" añadió, en alusión a las declaraciones del gobernante cubano tras las manifestaciones del pasado 11 de julio en varias ciudades de Cuba.
En otro vídeo, compartido poco después en las plataformas digitales, Hernández mostró a una mujer, "una de las asiduas encargada de reprimir en caso necesario".
La también activista es, con frecuencia y por períodos de tiempo prolongados, víctima del asedio policial en su propio domicilio, donde ha permanecido impedida de salir durante semanas.
Recientemente, Hernández, una de las acuarteladas en San Isidro, mostró a través de un vídeo la cara de su represor, quien se encontraba junto a una patrulla policial en la calle vigilándoda. El hombre en tono desafiante se acercó a la casa de ella para proferir consignas oficialistas y lanzar vivas a la revolución, Díaz-Canel y al fallecido Fidel Castro.
"Patria y Vida", "Tu revolución está caduca y obsoleta, no sirve y es corrupta" le respondió ella, sin dejar de grabar.
Tras las manifestaciones del 11 de julio se ha acrecentado la represión en Cuba, donde reportes independientes cifran en casi 150 los detenidos y desaparecidos desde ese día.
Los testimonios que han comenzado a circular en las redes, por su parte, muestran la violencia con la que fueron reprimidos algunos manifestantes, los enfrentamientos en las calles y a grupos militares y paramilitares armados de palos para arremeter contra quienes participaron de las protestas.
Bruno Rodríguez, sin embargo, afirmó que ese día no ocurrió un estallido social en el país, sino disturbios y "desórdenes en una escala muy limitada, aprovechando de manera oportunista las condiciones difíciles que estamos viviendo hoy los cubanos".
Díaz-Canel, quien negó que los manifestantes hubieran sido reprimidos violentamente y calificó de mentiras y calumnias las denuncias y reportes al respecto, dijo que las protestas se debían al embargo norteamericano, la pandemia de coronavirus y las carencias materiales.
El gobernante también afirmó que en las redes sociales "han querido tergiversar mis palabras sobre el llamado a los revolucionarios a defender las calles".
Sin embargo, poco después del primer reporte de manifestación pacífica en San Antonio de los Baños, el gobernante hizo un llamado al enfrentamiento en una transmisión especial de la televisión cubana.
“Estamos convocando a todos los revolucionarios del país, a todos los comunistas a que salgan en las calles en cualquiera de los lugares donde se van a producir estas provocaciones, desde ahora y en todos estos días. Y enfrentarlas con decisión, firmeza y valentía”, dijo en su momento.
Mientras, crece el rechazo a la respuesta del régimen cubano al legítimo reclamo de su pueblo a manifestarse y expresar su desacuerdo con el gobierno.
Este viernes la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió la liberación de manifestantes y periodistas independientes detenidos en las masivas manifestaciones de esta semana, a la par que denunció el uso de la violencia contra algunos de ellos.
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