Iliana Hernández Cardosa (Guantánamo, 1973) es una activista cubana, reportera de CiberCuba en La Habana, que reside en Cojímar, municipio de la Habana, Cuba. Ciclista, modelo y bailarina, emigró a España (1996) donde estudió Protésica dental y Community Manger y figuró e hizo de doble de primeras actrices en series y películas.
Decidió repatriarse a Cuba donde creó, presentó y produjo Lente Cubano , un programa audiovisual que plasmaba la realidad cubana a través de la cultura, la denuncia ciudadana, la promoción de negocios privados y la difusión de los artistas conocidos y desconocidos en el panorama de la isla. En septiembre de 2016, lanzó el programa en Miami y fue advertida a su regreso a la isla en el mismo aeropuerto sobre el contenido del mismo, en especial , con la sección "Denuncias ciudadanas". El audiovisual, que circulaba en internet y a través de El Paquete la llevó a estar en el ojo de la Seguridad del Estado y en febrero de 2017, Hernández, también miembro fundadora del movimiento Somos+, fue detenida en La Habana Vieja y despojada de sus objetos personales.
Antes de esta detención ,ya Iliana había sufrido otras por su labor como activista en Somos +, su participación en 2013 en el proyecto Estado de Sats y en el 2016, junto a José Daniel Ferrer, líder de la UNPACU, quien fue deportado a Santiago de Cuba.
La labor de Hernández Cardosa está marcada por un sin número de amenazas y detenciones que no le han impedido seguir con su trabajo como reportera a pie de calle en Cuba. En mayo de 2019, fue violentamente detenida junto a otros activistas durante la marcha que organizó la comunidad LGBTI+ cubana. En enero de 2020 los agentes de la Seguridad del Estado y la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) allanaron su casa buscando pintura roja que la vinculara con el movimiento opositor Clandestinos cuyas acciones pretenden eliminar, con pintura de este color, imágenes de Fidel Castro vertiéndola sobre murales y bustos.
En el empeño del régimen cubano por boicotear su actividad ha sido acusada (enero 2020) del delito de receptación y le han confiscado objetos personales que, según el régimen, no cuentan con la documentación que acredite su propiedad. En febrero de 2020, la activista recibió una amenaza de muerte mientras realizaba una de sus habituales transmisiones en Facebook desde La Habana. Un usuario entró para decirle que un día de estos iba a "amanecer con la boca llena de hormigas". En junio, Hernández denunció que su internet había sido cortado horas antes de la protesta pacífica convocada por organizaciones independientes para exigir justicia a raíz del asesinato de un joven a manos de un policía, en Guanabacoa. Finalmente fue detenida para impedir que asistiera a dicha protesta.
Iliana Hernández seguirá su lucha por lograr cambios en Cuba a pesar del peligro y la condena a los que sabemos se enfrentan los opositores al régimen. "No me pueden obligar a que esté de acuerdo con un sistema totalitario que abusa del poder, humilla, maltrata y esclaviza al pueblo cubano", sostiene.