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Estados Unidos denunció al régimen de Nicolás Maduro de violar sistemáticamente los derechos humanos y anteponer sus intereses a los del pueblo venezolano, luego de que Caracas rompiese el diálogo con la oposición debido a la extradición del funcionario Alex Saab Morán, a quien la administración estadounidense acusa de lavado de dinero.
“Nicolás Maduro necesita poner fin a los abusos contra los derechos humanos y debe permitir que el pueblo venezolano, su pueblo, participe en elecciones presidenciales, parlamentarias, regionales y locales libres y justas”, declaró este lunes, Ned Price, portavoz del Departamento de Estado.
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La administración Biden ha apoyado de manera consistente las negociaciones entre la Plataforma de Unitaria, liderada por Juan Guaidó, y el régimen de Maduro, aseveró Price en una rueda de prensa.
“Las apoyamos, seguimos apoyándolas y seguimos creyendo que deben conducir a la restauración pacífica de la democracia que el pueblo de Venezuela desea y merece con tanta insistencia”, indicó el funcionario del Departamento de Estado, para quien las negociaciones “deben dar como resultado el fin de los abusos de los derechos humanos por parte del régimen y el alivio del terrible sufrimiento humanitario de Venezuela”.
Al suspender su participación en dichas negociaciones, consideró Price, el régimen de Maduro ha dejado muy claro que está poniendo sus intereses una vez más por encima de los intereses del pueblo venezolano.
“Están poniendo el caso de un individuo por encima del bienestar de millones de venezolanos que han dejado en claro sus aspiraciones de democracia, mayor libertad, prosperidad y un alivio del sufrimiento humanitario que el régimen ha infligido al pueblo de Venezuela”, señaló el portavoz de la diplomacia estadounidense, asegurando que continuarán trabajando con el pueblo venezolano y sus socios internacionales para abordar la crisis en ese país.
Asimismo, hizo un llamado a la comunidad internacional para que redoble su apoyo al pueblo de Venezuela mientras trabaja para restaurar pacíficamente la democracia en su país. En ese sentido, afirmó, trabajarán con sus homólogos de Ecuador y Colombia, adonde se ha desplazado una delegación del departamento que trabajará hasta el jueves en temas relacionados con la crisis venezolana.
Por su parte, el gobierno bolivariano rechazó categóricamente las declaraciones del portavoz estadounidense, acusando a la administración Biden de operar “como una poderosa maquinaria mundial para la violación sistemática de los derechos humanos y la violación flagrante y permanente del derecho internacional a nivel global”.
Para Caracas, la extradición de Saab a territorio estadounidense demuestra el desprecio de esta administración hacia el derecho internacional. Calificando la acción legal como un “secuestro”, el régimen de Maduro aseveró que el odio y la persecución sistemática de Biden contra Venezuela, no solo pretende “ejercer presión y amedrentar al pueblo y al gobierno”, sino agredirlo “mediante el criminal bloqueo económico contra el país”.
Para el régimen chavista, “el embajador Saab jugó un papel fundamental para ayudar al pueblo venezolano a mitigar los perversos efectos el bloqueo criminal en áreas humanitarias vitales como alimentos, medicamentos, combustible, entre otros”.
Para Estados Unidos, que solicitó su extradición desde Cabo Verde, el empresario colombiano es un operador que ayuda a Maduro a organizar acuerdos comerciales que Washington busca bloquear mediante sanciones. Además, le acusan de lavado de dinero en nombre del gobierno de Venezuela y de participar en un esquema de soborno vinculado al sistema de control de cambio impuesto por el Estado de Venezuela.
En 2019, la justicia estadounidense sancionó a Saab por presuntamente orquestar un plan que le permitió a él y a Maduro beneficiarse de un programa estatal de distribución de alimentos.
“Si el sistema de justicia de Estados Unidos fuera tan independiente y justo como ufanan ser, estaría persiguiendo los delitos internacionales cometidos por sus aliados en la Región, como por ejemplo Colombia, primer productor de cocaína y tercero en crimen organizado en el mundo respectivamente, o contra la propia pandilla de Juan Guaidó, a quien ellos mismos han ayudado a beneficiarse del expolio, despojo y robo del patrimonio del pueblo venezolano”, contestó Caracas en un comunicado que calificó al gobierno estadounidense de falso, inmoral y “verdugo salvaje que ha violado masiva y sistemáticamente los derechos humanos de nuestro pueblo”.
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