El General de División Luis Alberto Rodríguez López-Calleja fue electo este sábado diputado a la Asamblea Nacional por el municipio villaclareño de Remedios, en una sorpresiva decisión que completa su ascenso en las esferas de la jerarquía gubernamental cubana.
La elección del general Rodríguez López-Calleja, de 61 años, se produjo en la mañana de este sábado, durante una sesión extraordinaria de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Remedios, en la central provincia de Villa Clara, tierra natal del actual mandatario Miguel Díaz-Canel Bermúdez, informaron medios de la prensa provincial sin ofrecer detalles sobre el escrutinio.
El nuevo diputado de Remedios fue escogido para cubrir el puesto que quedó desocupado tras el fallecimiento de Antonio Pérez Santos, presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) en Villa Clara. La plaza de Pérez Santos estaba vacante desde hacía más de un año, pues murió el 14 de septiembre de 2020.
La promoción de López-Calleja al Parlamento abriría la opción para ser designado presidente de la República de Cuba, aunque previamente la Asamblea Nacional deberá modificar el Artículo 127 de la Constitución sobre el límite legal de 60 años para ser designado jefe de Estado en un primer mandato y el artículo 7 de la Ley del Presidente y Vicepresidente. Pero no está invalidado para la función de vicepresidente.
El término presidencial de Miguel Díaz-Canel expira el 10 de octubre de 2029, según la legislación cubana que, en la Constitución de 2019, limitó a dos mandatos el ejercicio del cargo de presidente; aunque puede ser revocado por varias causas.
El acto de este sábado en la Asamblea Municipal de Remedios coincidió con la sesión de apertura del II Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), que sesionará este fin de semana en La Habana.
La reunión partidista escamoteó la ausencia del también miembro del Buró Político a la sesión inaugural del foro, informando en el diario Granma que "al II Pleno del Comité Central, compuesto por 114 miembros, asisten 112 militantes —el 98,2 por ciento—, los no presentes están en funciones de trabajo en el exterior".
El pasado abril, López-Calleja fue electo como miembro del Buró Político del Comité Central del PCC durante el Congreso de la organización partidista, en lo que constituyó una evidente movida para consolidar su rol jerárquico en la cúpula gobernante.
En septiembre del año pasado, el gobierno de Estados Unidos sancionó a López-Calleja como parte de la política de reforzamiento cerco financiero contra entidades y figuras de la élite gubernamental del régimen cubano. Tres años antes, en noviembre del 2017, la administración de Donald Trump ya había incluido a GAESA en la lista de entidades cubanas restringidas del Departamento de Estado.
La elección del General de División Rodríguez López-Calleja como diputado al unicameral y unipartidista parlamento, sucede a menos de un mes de la marcha cívica convocada por Archipiélago para el 15 de noviembre y declarada ilícita por el gobierno.
San Juan de los Remedios está situado a 335 kilómetros del Palacio de Convenciones de La Habana, sede del cónclave comunista, que analizará el cumplimiento de los acuerdos del octavo congreso del único partido legal en Cuba, y temas fundamentales para la vida del país y la organización, según la información oficial.
"Haré el mayor esfuerzo para estar a la altura del gran honor de representar a Remedios en la Asamblea Nacional del Poder Popular", declaró el exyerno de Raúl Castro y presidente del conglomerado militar-empresarial GAESA, según el reporte de la emisora provincial CMHW.
San Juan de los Remedios, conocida como la Octava villa y sus Parrandas en Navidades, fue fundado en 1513 por el extremeño Vasco Porcallo de Figueroa, a cinco kilómetros de la costa norte cubana; y en 1980 su centro histórico fue declarado Monumento Nacional por tener varios edificios emblemáticos de la arquitectura española del siglo XVII.
Uno de sus principales atractivos es la Iglesia Mayor San Juan Bautista, con 13 altares enchapados en oro y una imagen de la Inmaculada Concepción embarazada que; durante siglos, permanecieron camuflados bajo capas de pintura para evitar su saqueo por piratas y corsarios.
Los altares y la singular imagen fueron redescubiertos entre 1944 y 1954, cuando Eutimio Falla Bonet, que murió en el exilio en Madrid, en 1965, e hijo de Laureano Falla Gutiérrez y Dolores Bonet, una de las familias cubanas más ricas de la primera mitad del siglo XX, financió la restauración de la Iglesia Mayor de San Juan Bautista.
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