Estudiante universitario golpeado el 11J fue multado por desorden público

"Fiscalía me dio respuesta por los sucesos del día 30 de abril y por los del 11 de julio. Ha sido un proceso muy irregular" dijo Leonardo Romero Negrín.

Leonardo Romero Negrín © Facebook Leonardo Romero Negrín
Leonardo Romero Negrín Foto © Facebook Leonardo Romero Negrín

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Leonardo Romero Negrín, el estudiante universitario cubano golpeado por la policía el 11J, recibió la sanción de la Fiscalía esta semana, fue multado por desorden público.

El joven que protestó en la Habana Vieja con un cartel de "Socialismo Sí, Represión No" compartió en su perfil de Facebook una crónica en que detalla la angustia que vivió su familia durante los meses de espera por la sentencia. Además reiteró a sus seguidores que mantiene sus ideales de lucha por un país mejor.


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Romero indicó que se solidariza con los presos políticos cubanos. El listado de la ONG Cubalex ya señala que existen en la isla 1,249 personas detenidas tras los sucesos del 11J y más de 600 están presos todavía. A continuación CiberCuba comparte el texto íntegro del joven cubano.

"Ayer soñé con los hambrientos, los locos, los que se fueron... los que están en prisión" (Serú Girán)

Ante todo quiero agradecerle a todas mis amistades, familiares y personas que no conocía y que me mostraron su preocupación y cariño durante estos meses de incertidumbre.

Ya la Fiscalía me dio respuesta por los sucesos del día 30 de abril y por los del 11 de julio. De más está decir que ha sido un proceso muy irregular, donde evidentemente no sabían qué hacer porque no había manera de que quedaran bien parados. Eso suele sucederles cuando chocan con la sinceridad.

Han sido más de seis meses a la espera, entre insomnios y preocupaciones de quienes nunca creyeron que me tocaría. En especial mi padre, con quien discutía mucho cada vez que sucedía algún abuso y al verme molesto me decía: "Deja eso que no vas a resolver nada". Veía esas cosas de manera distante y a ratos le recordaba que pensar así es lógico...hasta el día en que, desde bien de cerca, te toca.

Mi madre tuvo varias crisis de ansiedad y muchas llamadas de acoso y amenaza por parte de la Seguridad del Estado. No me quejaría si no fuera porque he visto su evolución ante tales sucesos, al punto que ya me cuenta entre risas "llamó el seguroso y le colgué... Le dije que conmigo no tienen nada de qué hablar"; o cuando he tenido vigilancia fuera de la casa (26 de julio y 5 de agosto) y me ha dicho "no quieres salir conmigo a buscar el pan... nada más que pa' joder?"

Sé que lo hace para que yo no crea que eso le afecta... Ya no me dice "habla bajito" y por eso aquel día en que salí en libertad, por primera vez, mientras yo creía que me la iba a encontrar hecha un mar de llanto me la encontré muy feliz con un cartel que decía: "Leo Sí, Represión No". Eso me devolvió el alma al cuerpo y recordé de quién saqué la rebeldía.

Desde aquel día 30 (abril 2021) descubrí la dicha de tener buenos amigos y verifiqué que uno recoge lo que siembra cuando a la salida de la estación de Santiago de las Vegas me encontré a dos jóvenes que fueron mis alumnos discutiendo con un seguroso que pensaba que ellos eran periodistas independientes. Cuando los vi ahí, discutiendo con ese oficial con gestualidad de "no me voy a ir aquí hasta que lo liberen" se me estrujó el corazón. Jamás me pasó por la mente esa escena cuando, por primera vez, tomé una tiza en mis manos.

Todavía tengo fresco el recuerdo de haber abrazado a otros tres amigos del alma que saben de sobra cuánto los quiero. A Lisbeth Moya por estar ahí a brazo partido, a Miguel Hayes por su amistad y consejos, y a Hamed Toledo por su espíritu anarquista; con quienes me tomé aquella foto, con sendos mar pacíficos, que le dedicamos a nuestra hermana Mel Herrera.

Les agradezco por haberme acompañado ese día al cementerio para rendirle homenaje a mi maestro, quien ese día casualmente cumplía un año de fallecido. Mi maestro de física y guía espiritual, el babalawo Héctor Ernesto Pérez Pérez, quien me repetía en sus últimos días: "Chinito, léete el Libro tibetano de los muertos... para que me entiendas y sepas que hay que saber morirse con dignidad".

Aún en mi cabeza resuenan los patakines que con paciencia me enseñaste. "Gracias viejo, tanto me diste... Algo se irá conmigo hasta la muerte".

Pido disculpas a aquellas amistades y compañeros de estudio que han sido interrogados en sus universidades en complicidad con los decanatos. Me siento orgulloso de quienes se negaron a colaborar y se opusieron firmemente cuando les advirtieron sutilmente del "riesgo" de andar con un "mercenario".

También pido disculpas a quienes se alejaron de mí. Pero no les reprocho... ahora tengo más espacio. Y desde luego, más tiempo para hacer experimentos "antigravedad" junto a mi amigo y maestro de física Joe Luis Cerutty, quien hace 5 años detuvo el turno de clases e interrumpió a Newton para leernos "Yugo y estrella". Joe, todavía me río de tu ocurrencia de recitárselo al policía, que nos trasladaba en la misma patrulla.

Un abrazo fraternal a mis hermanos masones y abakuás a quienes dedico mi más profundo respeto y agradecimiento por estar ahí donde les he necesitado. Se me hace enorme la lista y tengo fe en que quienes tienen que saber mi gratitud lo saben, y sobre todo a quienes pensando distinto a mí se han tomado el tiempo de escucharme sinceramente, entenderme y respetarme. Por tal motivo les respeto mucho más.

Reitero mi especial cariño a alguien a quien le tengo que agradecer desde el día en que la conocí, mi abuela Norma, la neurófila... tan joven que parece mi amiga de la infancia. Gracias por haberme regalado tanta Historia en esas tardes interminables de café y Martí (tu especialidad). Qué privilegio escuchar de primera mano a quien fuera alumna del hijo de Quesada, el albacea martiano. También salúdame a Ferrari... dile que pronto estaremos hablando nuevamente de astronomía.

Finalmente... Fiscalía determinó imponerme una multa por desorden público por lo del 11 de julio, a sabiendas de que fueron "los policías vestidos de civil" quienes más golpearon y las cámaras del Capitolio que captaron todo, lo saben. Espero, si tan seguros están de lo contrario, que las pongan íntegramente en el NTV.

Por otra parte, respecto al caso del 30 de abril, el del cartel "Socialismo Sí, Represión No", me notificó un agente de Villa Marista que decidieron archivarlo con un sobreseimiento (tipo de resolución judicial que dicta un juez o un tribunal, suspendiendo un proceso por falta de causas). No por "falta de elementos que me incriminen" (según ellos) sino porque no quieren meterme preso.

Ustedes no son tan bondadosos y han quedado expuestos porque saben que el socialismo del que hablo es el que ustedes a diario mancillan faltándole el respeto a algunas personas que culturalmente se asumen "Patria o Muerte" (algunas a mi consideración, honestas) que se me han acercado con pena para decirme lo decepcionados que están de lo que está pasando.

Con qué dolor me dicen que jamás cederán (según sus propios términos) a ningún chantaje del Norte, pero que tampoco callarán más ante lo mal hecho por el gobierno. Eso, aunque me lo dicen en voz baja, al menos me alivia porque sé que saben que gobierno es una cosa y socialismo es otra. Que Stalin es una cosa y Rosa Luxemburgo es otra.

Me alegro de que lo sepan y que me recuerden que el mismo autor de "El Capital" decía que si esos dogmáticos y fanáticos, que andaban por ahí hablando a su nombre, se decían "marxistas" pues entonces él no lo era.

Me alegro que haya quien sepa separar las cosas y ser coherente con lo que piensa mas no cómplice de ninguna injusticia. Deseo que no caigan en la maquinaria del odio ni en extremismos, ni de un lado ni del otro. Por eso me pregunto: si mi caso fue archivado ¿por qué hay personas privadas de su libertad incluso por haber hecho lo mismo e incluso menos?

¿Por qué el privilegio? ¿Por qué la injusticia? A todas mis hermanas y hermanos presos solo les digo una cosa, "Sobrevivan, por favor". Ya nos veremos... aquí afuera o allá dentro.

"Ayer soñé con los hambrientos, los locos, los que se fueron...los que están en prisión".

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