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La activista y periodista independiente Daniela Rojo se encuentra junto a sus dos hijos menores de edad en un centro de acogida para refugiados de Frankfurt, Alemania, a donde llegó tras escapar de Cuba.
Rojo y sus hijos llegaron a esa ciudad alemana el pasado domingo y pidió protección internacional por ser víctima de acoso, secuestro y detenciones arbitrarias por parte de la Seguridad del Estado.
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"Ya estoy extrañando mucho a mi gente, pero aquí mis niños y yo estamos seguros y no seré perseguida por mis ideas políticas. Mi agradecimiento eterno a las autoridades alemanas que nos han tratado como familia", escribió esta mañana en su perfil de Facebook.
CiberCuba intentó entrevistar a Daniela Rojo para conocer otros detalles de su huida de la isla, pero hasta el momento no ha respondido los mensajes enviados.
Daniela Rojo fue una de las coordinadoras del grupo Archipiélago, donde se organizó la marcha del 15N, aunque renunció a ese puesto porque necesitaba proteger a su familia, de acuerdo a una declaración que hizo pública al dar a conocer la noticia.
"No he tenido ningún problema con los miembros de la plataforma, a los que abrazo fuertemente y les dejo saber que ha sido un gran placer para mí pertenecer a un equipo tan entregado", aclaró en noviembre del año pasado.
La última detención documentada ocurrió a inicios de mayo, cuando permaneció durante varias horas bajo la custodia de la Seguridad del Estado y donde recibió varias amenazas.
"Piquete, me llevan, el oficial Dennis del DSE, junto a un patrullero me acaban de detener en la calzada de Luyanó. Tengo que recoger a mis niños en la escuela y en el círculo por favor calienten!!", escribió poco antes de ser detenida por la policía política.
La presión externa en las redes sociales motivó que fuera puesta en libertad unas horas después.
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