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El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos de Cuba informó que las intensas lluvias en las provincias del centro del país, este fin de semana, representaron el 42% de la media de precipitaciones para junio.
Antonio Rodríguez Rodríguez, director de esa instancia gubernamental, dijo que las lluvias afectaron las provincias de Villa Clara, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila, donde se registraron cuatro acumulados superiores a los 150 milímetros, y 11 pluviómetros marcaron más de 100 milímetros.
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Las precipitaciones fueron ocasionadas por un sistema de bajas presiones en el Golfo de México, y alcanzaron una media para junio de 81% en el occidente del país y de un 42% en la región central, comentó el directivo en Twitter.
La prensa local de la provincia espirituana destacó que a pesar de estos acumulados, los embalses del territorio recibieron poco beneficio y apenas tienen unos 453 millones de metros cúbicos de agua, un 38 por ciento de su capacidad de llenado.
El director general de la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico en Sancti Spíritus, Dixán Ravelo, explicó que al mediodía de este lunes la presa Zaza, la mayor de Cuba, con una capacidad de llenado de 920 millones de metros cúbicos, alcanzaba un 28 por ciento de su capacidad.
"En estos momentos solo vierte la presa Siguaney, que está por encima de su volumen total", explicó el periódico Escambray de esa provincia.
Actualmente en Cuba hay 360 estaciones de bombeo de agua potable afectadas por la sequía, lo que impide a unas 456,470 personas de todo el país acceder a ese servicio vital.
En Holguín, Las Tunas, Santiago de Cuba, Guantánamo y Camagüey se concentran la mayoría de los problemas, en medio de un período del año que deja pocas precipitaciones.
Casi un millón de ciudadanos en la isla tiene problemas para abastecerse de agua potable y al menos 400,000 lo hacen a través de pipas, aunque se estima que esa cifra podría duplicarse en provincias como Guantánamo, Holguín, Las Tunas, Camagüey, Sancti Spíritus, La Habana y Artemisa.
Las lluvias torrenciales empezaron el viernes y se extendieron hasta el domingo, dejando 750 viviendas con derrumbes totales, parciales y otros daños, en el centro y occidente del país, y al menos cuatro fallecidos.
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