El zurdo Néstor Cortés Jr., único cubano que intervino en el recién finalizado Juego de Estrellas de la MLB, cumplió su cometido como lanzador de la Liga Americana al conseguir el cero en el sexto episodio del encuentro y preservar la ventaja de la Liga Americana, que se impuso con score de 3x2.
El oriundo de Surgidero de Batabanó entró en sustitución de Martín Pérez para abrir el capítulo de marras y empezó su faena ponchando a Austin Riley. Seguidamente le dio boleto a Pete Alonso, dominó a Dansby Swanson en línea al jardín central y se complicó con un pelotazo a Travis d'Arnaud, pero resolvió con un "café" a Garrett Cooper.
En su primera asistencia al clásico de mitad de temporada, Cortés realizó 27 lanzamientos, 14 de ellos en strike, y básicamente apeló a una recta de cuatro costuras que le "caminó" hasta 94.5 millas por hora.
El abridor cubano de los Yanquis se había ganado el derecho de participar en el All-Star Game luego de una labor de casi un centenar de innings con efectividad de 2.63 y WHIP de 1.00.
El otro cubano que tenía pasaporte para este partido, el slugger Yordan Álvarez (Astros), se vio privado de intervenir debido a una lesión en una de sus manos.
En el choque, la Nacional rubricó sus dos anotaciones en el mismo primer inning ante los envíos de Shane McClanahan, pero el otro circuito respondió en la cuarta entrada con las tres carreras que le dieron el triunfo gracias a jonrones sucesivos de Giancarlo Stanton (con un compañero en los senderos) y Byron Buxton, en ambos casos a costa de las ofertas de Tony Gonsolin.
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