La cubana Belkis Cid Vázquez sobrevive inundada de aguas albañales en su casa desde hace cuatro años y nada indica que la solución está a la vuelta de la esquina.
Los desperdicios brotan por el patio y por el baño, y llegan hasta su habitación en el apartamento, ubicado en un edificio multifamiliar de Delgado 241, entre 4 y 5, Mantilla, Arroyo Naranjo, según explicó la mujer en una carta a la redacción del periódico oficialista Juventud Rebelde.
Cid Vázquiez apuntó además que lleva “todo este tiempo sacando diariamente esa inmundicia con un cubo, y vertiéndola en la esquina".
"El problema se agrava porque conmigo vive mi mamá, afectada por unas cuantas enfermedades de cuidado”, relató la mujer.
De acuerdo con la misiva, Cid Vázquez ha intentado resolver el problema por su cuenta sin tener éxito. En varias oportunidades contrató a un plomero, pero el trabajo fue insuficiente, porque el dictamen de la Dirección Municipal de la Vivienda, aclara que la solución conlleva un cambio de línea y que esa instancia no cuenta con el presupuesto necesario.
“Hace cuatro años, precisa, que he estado planteando la situación a todas las instancias posibles: Poder Popular, Vivienda, Aguas de La Habana y Partido, padeciendo todo tipo de excusas, promesas y peloteos. Los de Vivienda dicen que los trámites debe hacerlo el delegado, y este dice que está cansado de plantear el problema. He acudido infructuosamente a la Presidenta del consejo popular y al Poder Popular”, añadió la mujer en su carta a la prensa estatal.
En medio de su desesperación y la falta de atención por parte de las autoridades locales, Cid Vázquez se personó en la oficina de la directora Municipal de la Vivienda, tras conseguir una cita el 11 de agosto pasado. No obstante, la funcionaria no acudió al encuentro por estar de “certificado médico”, ni tampoco orientó que le dieran a la afectada otra cita para tratar su problema, en tanto espera también por la demorada visita de un inspector.
“El pasado día 15 fui a ver a Julio, funcionario de Aguas de La Habana, quien me dijo que enviaría el carro bomba. He reclamado y recibido, como siempre, miles de excusas, pero aún lo estoy esperando… Restan, en vez de sumar”, apuntó al final de su carta.
Un caso similar al de esta cubana fue noticia a mediados del mes anterior, cuando Estrella de la Caridad Fernández Saínz denunció que su casa lleva meses inundada de aguas albañales, sin que las autoridades le hayan podido dar solución a su problema.
Fernández Saínz, de 81 años, residente en avenida Zulueta, número 64 interior, entre Refugio y Genios, en La Habana Vieja, dijo al medio independiente CubaNet que, desde que el gobierno comenzó a construir un nuevo hotel cerca de su hogar, la dificultad se ha agudizado.
También en julio del año en curso los vecinos que residen en el edificio sito en la calle 15 No.1012, entre 10 y 12, en el capitalino barrio El Vedado, denunciaron que llevaban un mes viviendo entre aguas albañales.
En una queja emitida a CiberCuba, uno de los habitantes del inmueble explicó que ya habían reportado el caso a la Empresa Aguas de La Habana, pero hasta el momento no les daban ningún tipo de respuesta o solución al caso.
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