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La prensa oficialista en Cienfuegos consideró limitado el resultado que hasta ahora muestra el mercado cambiario estatal, que no consigue poner a la venta en las CADECA la suficiente cantidad de divisas para satisfacer las necesidades de la población.
Un artículo publicado este viernes por el periódico 5 de Septiembre consideró que “la medida no ha tenido el éxito esperado” y lamentó la débil implementación de una política económica clave para detener la inflación y avanzar en la recuperación del poder adquisitivo del peso cubano (CUP).
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Bajo el título de “Hasta hoy, estrategia cambiaria por debajo de las expectativas”, el periodista Julio Martínez Molina lamentó haber acertado en una columna anterior en la que alertaba de los efectos perniciosos de implementar la venta de dólares a las personas naturales si el Estado no contaba con la cantidad de divisa necesaria para satisfacer la demanda.
Tal y como avizoró, esto redundaría en una subida de la tasa de cambio del mercado informal. En su artículo de este viernes, Martínez Molina reconoció con pesar haber acertado en su pronóstico, cuando las divisas y la moneda libremente convertible (MLC) alcanzaban este viernes los 170 pesos en el mercado informal cubano mientras en las CADECA se mantiene la cotización de 123.60 pesos por dólar.
“Ante la irrupción de una estrategia cambiaria nacida sietemesina (por no contarse con la divisa suficiente para vender, en cantidad y durante todo el día, en las unidades designadas), la contrarrespuesta urgente del mercado informal sería la elevación, aún más, de los gravámenes de las monedas fuertes”, señaló el periodista, lamentando que se hubiera cumplido lo que profetizaron él y miles de cubanos que, desde el primer momento, vieron el efecto que provocaría en el mercado negro una venta oficial de divisas tan pobre y limitada.
“Aunque quizá sea temprano para valorar, todo sucedió conforme a lo previsto”, afirmó. “En efecto, así fue. La espiral alcista actual redunda en que al publicarse el comentario las respectivas ventas de dichas monedas ronden los 165 pesos”.
En un giro crítico que se viene manifestando esporádicamente en medios de prensa provinciales, el analista apuntó a uno de los factores que dispara la demanda de las divisas en Cuba.
“No se precisa ser un gurú del sector para inferir que el disparador de la emigración vía Nicaragua conducirá a que en pocas semanas el dólar alcance los 200 pesos”, vaticinó Martínez Molina, poniendo el foco en un fenómeno que el régimen cubano pretende “normalizar”.
Sin embargo, el flujo migratorio hacia la “ruta de los volcanes” constituye el indicador más claro de la crisis generalizada y sistémica que atraviesa el país, que ha provocado el mayor éxodo migratorio de su historia y una auténtica tragedia que las autoridades afrontan con total irresponsabilidad, conscientes de la impunidad que les otorga el sistema totalitario que defienden y pretenden perpetuar.
“Probablemente todavía existan algunos ases institucionales por sacar (es algo que muchos esperamos con vehemencia); pero, de no ocurrir así, el cisma entre la opción estatal -la más favorable por mucho al comprador, aunque harto reducida-, y la informal, alcanzará distancias insospechadas”, manifestó el autor del artículo, dejando abierta una puerta a la posibilidad de que las autoridades puedan corregir el rumbo del mercado cambiario y de la economía en Cuba.
“Si las personas que logren comprar los dólares no lo pueden invertir en Cuba para sus artículos de primera necesidad y lo utilizan para uso en otro país entonces no han hecho nada. Seguirá la fuga de divisas y continuarán las carencias”, opinaba un cubano a poco de implementada la venta oficial de divisas.
Para el economista Elías Amor, antes de fin de año es muy posible que el valor de las divisas extranjeras supere los 300 pesos cubanos, situación que está dada por la falta de control del Banco Central de Cuba sobre el tema y su excesiva dependencia del gobierno central.
Por su parte, el prestigioso profesor de la John Hopkins University, Steve Hanke, declaraba recientemente que “la espiral de muerte económica de Cuba sigue girando”, ante la devaluación sufrida por el peso cubano en los últimos días, que lo sitúa como la cuarta moneda más depreciada del mundo.
“Gracias a las políticas económicas del régimen comunista, el valor del peso cubano está desaparecido. Desde enero de 2021, el peso se ha depreciado un 68,35 % frente al dólar”, señaló.
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