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La red social Twitter suspendió este jueves las cuentas de los programas televisivos cubanos Con Filo, Cuadrando la Caja y el proyecto Cuba Joven.
El portal oficialista Cubadebate criticó la medida, tomada dos días después de que la red social etiquetara a medios de prensa como Granma, Juventud Rebelde y el propio Cubadebate como "afiliados al gobierno de Cuba", hecho que ocurrió el pasado martes 25 de octubre.
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"Ya se vuelve habitual este proceder y su ejecución articulada evidencia sus objetivos", señaló la información.
El Proyecto Inventario reveló que el último tuit que se publicó en la cuenta de Con Filo, el 25 de octubre a las 4:15 pm, compartía una imagen alterada del perfil de CiberCuba, donde se le presentaba falsamente como un medio etiquetado por Twitter como afiliado a la CIA.
"El tuit de Con Filo decía: 'Si vamos a etiquetar medios, pues...etiquetemos bien', citando un tuit del memero oficialista oficialista RcgThiago, que también ha sido suspendido", señaló Inventario.
Con Filo, un programa televisivo diseñado para hacer propaganda del régimen mediante la difusión de calumnias sobre los activistas, periodistas independientes y artistas que critican la dictadura, se burló en su muro de Facebook de la sanción calificándola de "censura".
"Nos cogió eso que anda. Twitter suspendió la cuenta de Con Filo... Se habían demorado. ¿Será que nos tienen miedo? Desafortunadamente, grabamos el programa después de recibir esta "agradable noticia", así que no pudimos dar el chucho debido ¡Ya los cogeremos luego", comentó.
Por su parte, Cubadebate acusó a la plataforma de haber aplicado en los últimos años lo que denominó "sospechosos" bloqueos a medios de prensa, instituciones públicas y organizaciones cubanas, en momentos de "contingencia informativa".
Según el portal, el 8 de enero de 2013 Twitter suspendió indefinidamente más de 900 cuentas de los Joven Club de Computación y Electrónica, cuando estos transmitían un acto político.
También citó un bloqueo que hizo Twitter a su cuenta el 18 de mayo de 2018, en medio de la cobertura al accidente aéreo ocurrido en La Habana, y un apagón informativo que sufrieron medios de comunicación, periodistas y personalidades cubanos el 11 de septiembre de 2019, quienes vieron bloqueadas sus cuentas poco antes del inicio de la Mesa Redonda con el gobernante Díaz-Canel.
"Todo lo anterior viene a confirmar que las redes sociales no son tan libres y democráticas como algunos piensan, más bien todo lo contrario", afirmó la nota.
El martes pasado, autoridades y medios de comunicación oficialistas denunciaron la decisión de la red social de etiquetar como "afiliados al gobierno" a Granma, Cubadebate y Juventud Rebelde.
En opinión del ideológico del Partido Comunista, Rogelio Polanco Fuentes, la acción "censura y estigmatiza a medios públicos del país. Otra evidencia de la manipulación de los algoritmos para restar visibilidad a unos medios en relación con otros".
Pero de acuerdo con la plataforma, los medios de comunicación afiliados al Estado son aquellos donde "el Estado ejerce control sobre el contenido editorial mediante recursos financieros, presiones políticas directas o indirectas o el control sobre la producción y distribución", algo que no sucede con medios de otros países que también están financiados por el Estado, pero que poseen "independencia editorial, como por ejemplo, la BBC en el Reino Unido o NPR en EE.UU.", que no entran en la categoría.
Por otra parte, Facebook cerró varias cuentas manejadas por la Seguridad del Estado cubana que se dedicaban a desprestigiar a activistas, opositores, periodistas independientes y ciudadanos incómodos al régimen.
El perfil de "Razones de Cuba", un polémico programa dedicado a armar "expedientes" contra los críticos del gobierno fue clausurado, al igual que las cuentas de Guerrero Cubano (con similar propósito), La mala palabra, Cuba no es Miami y Karlito Marx Jeune, entre otros.
Estos perfiles troles, la mayoría sin rostro, son monitoreados por las fuerzas represivas del régimen de La Habana para actuar contra los ciudadanos comunes críticos con la dictadura, según denuncias de las propias víctimas.
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