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“¿Qué cenarán los cubanos este fin de año?” fue la gran incógnita a la que respondieron los habitantes de un país donde “ni pollo hay”, como afirmó alguien.
“No sé ni qué decirte porque la carne de puerco está carísima”, dijo una mujer a la pregunta lanzada por el portal de noticias independiente Cubanet para su página de Youtube.
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Otra cubana dijo que lo más probable es que comiera pollo que es “lo que está en el ambiente”.
Un hombre afirmó, incluso, que cocinaría lo que el gobierno dé la posibilidad de comprar porque la situación es “mala”.
En cambio, varios aseguraron que no sabían qué comer durante la conmemoración de esa jornada de fin de año cuando habitualmente en Cuba se suele cenar arroz moro, carne de cerdo, ensalada y viandas porque los precios continúan aumentando y la comida escaseando.
“Ni sabemos”, dijo un anciano, “los que tienen, comen”, y agregó que llevaba tres días alimentándose únicamente con arroz amarillo porque no hay nada más.
La carne de cerdo ya no será una opción para muchos porque su precio ha rebasado los 400 pesos.
Eso sí, el cubano llevará a la mesa este año mucho estrés y mucha angustia, como apuntó una cubana que insistió en que este año sería diferente porque los alimentos están más caros.
Aunque una anciana dijo que el gobierno lo pone todo y otra, que las personas resolvían y siempre comían, una mujer concluyó que no se puede comer nada porque ni pollo hay.
A inicios de año, ya se alertaba que la carne de cerdo en Cuba subía aceleradamente, en un momento en que se comercializaba a más de 200 pesos la libra, un valor que estaba al alcance de muy pocos en el país.
La falta de alimentos para los cerdos provoca que diariamente ocurran muertes de animales por hambre y nazcan menos crías, con la consecuente disminución de la masa porcina a nivel nacional.
Sin embargo, su costo continuó subiendo sistemáticamente y se ha llegado a vender a precios más altos de los reportados en los albores de 2022.
La vida está muy cara y alimentarse seguirá siendo un lujo para los cubanos, como refirieron otros ciudadanos a quienes se les preguntó qué se podía comprar actualmente con 100 pesos cubanos.
Los precios se disparan y la vida se encarece, pero los salarios y las pensiones en Cuba alcanzan cada vez menos para garantizar una alimentación digna.
El gobierno cubano fijó el salario mínimo en 2,100 pesos cubanos (CUP), mientras que las pensiones oscilan entre los 1,528 y 1,733 CUP, según una resolución del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) publicada en la Gaceta Oficial.
La ministra de Trabajo de Cuba, Marta Elena Feitó Cabrera, reconoció que esos ingresos son insuficientes, no solamente el salario, también las pensiones y las prestaciones de la asistencia social, porque el salario ha perdido capacidad de compra, admitió.
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