Alcalde de Hialeah indulta a dos cerdos para que no sean comidos en cena navideña

Hamilton y Wilber se salvaron de la Caja China por esta vez y seguirán siendo parte del proyecto escolar de la escuela secundaria Palm Springs.

Alcalde de Hialeah indulta a dos cerdos en Navidad. © Captura/Telemundo 51
Alcalde de Hialeah indulta a dos cerdos en Navidad. Foto © Captura/Telemundo 51

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Este artículo es de hace 2 años

El alcalde de Hialeah, Esteban Bovo, indultó a dos cerdos para que no sean parte de la cena navideña como suele ser tradicional en las comunidades latinas del sur Florida, sobre todo en la cubana.

Hamilton y Wilbert recibieron el indulto de Bovo este martes y podrán seguir siendo parte del proyecto escolar “La Finka” de la escuela secundaria Palm Springs, donde están bajo el cuidado de los estudiantes, refiere un reporte de Telemundo 51.


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Esta tradición se asemeja a la del indulto de pavos que realiza el presidente de Estados Unidos previo al Día de Acción de Gracias.

La cena tradicional de Nochebuena de numerosas familias latinas, sobre todo las cubanas, en ese estado para Navidad y Fin de Año incluye un cerdo asado, que se cocina al carbón y acompaña otros platos tradicionales como yuca, moros con cristiano o congrí, entre otros.

El indulto de cerdos también ha ocurrido en otras ciudades del sur de Florida.

A finales de 2019 trascendió el perdón a dos cerdos de Miami-Dade por parte del alcalde Carlos Jiménez, quien por segundo año consecutivo, salvó de la Caja China, donde los asan al carbón, a dos de estos ejemplares, que fueron enviados a un refugio de animales.

"Al igual que el presidente perdona los pavos antes del Día de Acción de Gracias, como alcalde he perdonado a dos cerdos antes de Navidad. Gracias a la gente de Latin Cafe 2000 en Brickell Plaza por organizar un evento tan divertido”, dijo en esa ocasión Jiménez.

El lechón o cerdo asado es el plato principal de las mesas cubanas para estas fechas en cualquier parte del mundo, aunque en Miami, la creatividad de los cubanos exiliados los ha llevado a reutilizar un concepto de los años 50 en la isla: la conocida caja china o caja mágica.

Esta no es más que una especie de horno portátil donde se asa el cerdo, cubierto con una placa de metal en la superficie. Para muchos residentes en Florida, la Nochebuena o Navidad no es completa sin el cerdo preparado en la caja china.

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