El Centro Nacional de Sanidad Animal (CENASA) mostró preocupación ante el avance, la cercanía y posible aparición de la influenza aviar en Cuba y alertó a los criadores y la población en general.
La alerta emitida por la entidad estatal ocurre luego de la aparición de brotes múltiples por todo el mundo de esta enfermedad, conocida comúnmente como gripe aviar, una infección viral contagiosa que afecta a aves silvestres y domésticas, informó este sábado la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
La influenza aviar no se ha detectado, por el momento, en Cuba, pero considerando su comportamiento y el riesgo de introducción, básicamente a través de las aves migratorias, que están en su periodo de migración, el CENASA recomienda a profesionales, técnicos, criadores y población en general acciones que pudieran mitigar el impacto de la enfermedad, agrega la información.
La institución aconsejó evitar el contacto de aves silvestres con las crianzas avícolas y extremar las medidas de bioseguridad en instalaciones avícolas, además de prohibir el traslado de aves enfermas.
Asimismo, indicó no llevar aves producto de la caza hacia las viviendas, y que la manipulación de estas se realice en el mismo lugar donde fueron capturadas.
Además, pidió que los medios utilizados en la caza y faenado de estas aves sean desinfectados antes de ingresarlos en las viviendas.
Por último, el CENASA advirtió que, ante la primera señal de enfermedad o mortalidad de aves de crianzas o silvestres, no se deben tocar los cadáveres y debe ser contactado de inmediato el servicio veterinario de la localidad.
La influenza aviar se reporta tanto en aves silvestres como domésticas del continente, por lo que las autoridades sanitarias nacionales recomiendan extremar los mecanismos de vigilancia para evitar su llegada al país, que está seriamente amenazado.
De acuerdo con el patrón estacional, y el hecho de que esta enfermedad es básicamente diseminada por las aves migratorias, que están en su periodo de desplazamiento, se espera que el número de brotes en los países de la región aumente en los próximos meses.
La Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) demandó que “los países refuercen la vigilancia epidemiológica para la detección temprana y respuesta oportuna ante la amenaza potencial para la salud animal con impacto en la salud pública, para cuyo enfrentamiento es necesario el enfoque intersectorial”.
El pasado abril, el primer caso humano conocido de gripe aviar H5 en Estados Unidos se confirmó en un residente del estado de Colorado, EE.UU.
La persona que dio positivo a la prueba del virus de la gripe aviar A(H5) había participado en el sacrificio de aves de corral presuntamente contagiadas con la gripe aviar H5N1. El paciente informó que su único síntoma fue fatiga durante unos días y que desde entonces se comenzó a recuperar.
El Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de ese país precisó que la persona afectada por el virus permaneció aislada y tratada con el medicamento antiviral contra la gripe, oseltamivir.
Por esa misma fecha, México detectó un brote de gripe aviar de alta patogenicidad AH7N3 en dos naves de producción avícola comercial en el estado de Coahuila, en el norte del país, y ordenó el sacrificio de 70,000 aves para controlarlo.
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