El reconocido pianista cubano, Lázaro Valdés Espinosa, falleció en la madrugada de este domingo en La Habana, a la edad de 83 años.
“En la madrugada de hoy falleció en La Habana, a la edad de 83 años, el destacado artista cubano Lázaro Valdés Espinosa”, informó en Facebook el Instituto Cubano de la Música.
Valdés Espinosa era al fallecer el director de la agrupación Son Jazz y fue el último pianista de la Banda Gigante de Benny Moré, formación que dirigió y mantuvo activa durante varios años, tras la muerte de su creador, apunta, además la publicación.
Este artista cubano es reconocido por sus interpretaciones de diferentes géneros musicales, especialmente el son y el jazz y su legado musical constituye un referente para la pianística cubana.
Por decisión familiar, su cadáver será velado en ceremonia íntima, apunta la nota del citado organismo, quien no dio detalles de la causa de su deceso.
El también investigador cubano proviene de una de las familias de músicos más ilustres de la isla. Su padre fue el destacado percusionista Oscar Valdés Valdés.
Además es sobrino del popular cantante Vicentico Valdés y hermano del percusionista Oscar Valdés, voz y percusionista de Irakere y fundador de Diákara.
Asimismo, es el padre de Lazarito Valdés Rodríguez, director de Bamboleo, una popular orquesta de música bailable en Cuba, con un estilo cercano a la timba. Lazarito es además compositor, arreglista y pianista también con formación académica.
Valdés Espinosa fue también pianista en los desaparecidos Teatro Musical de La Habana y en el Teatro Martí, así como en la orquesta de la Radio y la Televisión en Cuba, y en agrupaciones de varios cabarets habaneros después de 1959. Fue el director, además, de los grupos Keleyá y T con E.
Con su grupo de jazz, al igual que con su hermano Oscar, fue asiduo en el club habanero La Zorra y El Cuervo.
Su proyecto Son Jazz, creado en 2003, está conformado por piano, bajo, batería, timbal, congas y una cantante, quien interpreta el jazz cubano a partir de géneros de la música tradicional: el son, la danza, la contradanza, el danzón, la guajira son y la canción en una fusión de excelente factura.
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