Con el propósito de elevar la motivación de sus trabajadores, la Unión Eléctrica (UNE) de Cuba aumentó el salario a parte de su plantilla en las termoeléctricas e inició la venta de artículos de aseo y alimentación en coordinación con la corporación CIMEX.
El anuncio vino acompañado de un listado de pronósticos y medidas de cara a 2023 en los que figura un incremento de la exigencia “en los sistemas de control de la calidad de los trabajos de mantenimiento y reparación de averías, tanto en la generación térmica como en la distribuida".
Lázaro Guerra Hernández indicó en declaraciones a Cubadebate que están demandando a los trabajadores que los objetivos de los trabajos se cumplan con rigor, en los plazos planificados y en la calidad requerida.
Para el logro de esos objetivos, el directivo calificó de “factor cardinal” el incremento de la motivación de los trabajadores del sector, aquejado de bajas en áreas claves por los bajos salarios y las condiciones de trabajo.
“Aumentó el salario del personal directo a la producción en la generación, y se comenzó a vender módulos de aseo y alimentación junto a la corporación CIMEX. Este elemento fue fundamental. Mitigó el éxodo en puestos claves, tanto de la generación térmica como de la distribuida", observó Guerra Hernández.
El director de la UNE indicó que "la experiencia se trasladó posteriormente a linieros y a otras labores imprescindibles para el sostenimiento del sistema eléctrico”.
En octubre, un técnico de la Termoeléctrica Antonio Guiteras -la más importante del país- indicó en un reportaje de la televisión estatal que antes del reordenamiento económico su empresa era de las más favorecidas en cuanto a salarios, algo que cambió luego.
Yoandry Flores, jefe de bloque y operador de sala de control, indicó entonces que tras la política económica puesta en práctica a inicios de 2021, habían caído "en un escalón muy bajo", lo que llevó a muchos trabajadores a renunciar y buscar empleo en sectores mejor remunerados.
Unas meses después, la UNE ha dado un paso para intentar solventar el reclamo. No ha sido difundido de cuánto es el aumento de los trabajadores del sector, ni tampoco en que consisten los "módulos de aseo y alimentación" que deben levantar la moral de los beneficiados con la medida.
En lo que respecta al diagnóstico de la situación actual, Lázaro Guerra dijo que aunque se han reducido desde diciembre los apagones por déficit en la capacidad de generación, los meses de verano serán los que pongan a prueba verdaderamente al Sistema Electroenergético Nacional (SEN).
En ese sentido añadió las acciones que se realicen en estos primeros cuatro meses serán vitales para el sostenimiento del SEN.
De enero hasta mediados de mayo se estiman afectaciones en el servicio eléctrico en el horario pico nocturno que pueden alcanzar hasta las tres horas como promedio diario, debido al incremento de labores de mantenimiento en las principales unidades de generación térmica del país.
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