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La provincia cubana de Las Tunas estableció medidas preventivas ante amenaza de influenza aviar por el paso de aves migratorias, tras alerta decretada por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para diez países de las Américas con focos de la enfermedad a mediados de enero, según autoridades territoriales.
En Cuba el riesgo de introducción de la gripe aviar es alto por el constante paso de aves migratorias y, aunque aún no hay casos, la vigilancia debe ser constante, afirmó este miércoles al oficialista Periódico 26 el especialista local de Sanidad Animal del Ministerio de la Agricultura, Ricardo Núñez Pérez.
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El experto informó que en esa provincia se han establecido medidas preventivas como la de colocar mallas antipájaros en las unidades, además de la vigilancia de la masa avícola y del monitoreo y control de aves migratorias que pasan por el territorio tunero, mediante exámenes a las aves centinelas, que se sitúan en ríos y presas donde las bandadas se detienen a beber agua.
Otras acciones que se realizan, dijo, es la de analizar la sangre de las aves que viven en los lugares por donde pueden pasar las migratorias. “Hasta ahora todos los análisis han sido negativos”, aseguró el especialista.
Asimismo, siguen recomendaciones del Centro Nacional de Sanidad Animal de evitar el contacto de aves silvestres con las de crianzas avícolas, extremar las medidas de bioseguridad en instalaciones avícolas y prohibir el traslado de aves enfermas.
La gripe aviar es una enfermedad infecciosa que principalmente afecta a las aves y que es causada por un virus de la familia Orthomyxoviridae. Los humanos se pueden contagiar con este virus por el contacto con aves enfermas.
Según la alerta de la OPS del 11 de enero último, se han detectado brotes de influenza aviar en aves domésticas, de granjas avícolas y/o silvestres en Canadá, Chile, Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Honduras, México, Panamá, Perú y Venezuela.
También, dijeron que hasta la fecha se han registrado dos infecciones humanas causadas por influenza aviar. La primera se detectó en Estados Unidos, identificada como del subtipo A (H5N1) y fue notificada el 29 de abril de 2022. La segunda fue en Ecuador, notificada el 9 de enero último.
La OPS reiteró que es vital controlar la infección en aves como una medida clave para reducir el riesgo para las personas y que ante la primera señal de enfermedad o mortalidad de aves de crianzas o silvestres, no se deben tocar los cuerpos y hay que avisar de inmediato al servicio veterinario de la localidad.
En abril de 2022, México detectó un brote de gripe aviar de alta patogenicidad AH7N3 en dos naves de producción avícola comercial en el estado de Coahuila, en el norte del país, y ordenó el sacrificio de 70,000 aves para controlarlo.
El brote, que afectó a gallinas usadas para la reproducción de pollos, se detectó tras la realización de pruebas PCR aplicadas por el brazo de salud agroalimentaria, dijo en esa ocasión la Secretaría, que añadió que se trataba de una cepa existente en algunas zonas de México desde 2012.
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