Los pilotos cubanos que llegaron recientemente a Florida en un ala delta motorizado completaron ya sus entrevistas de miedo creíble ante funcionarios de inmigración de Estados Unidos y esperan recibir luz verde para sus casos de asilo la semana entrante.
“Hemos finalmente completado las entrevistas de miedo creíble [temor de persecución] y estamos esperando ahora una respuesta de la Oficina de Asilo de USCIS [Departamento de Inmigración y Ciudadanía] sobre la aceptación del asilo político”, dijo a CiberCuba el abogado Willy Allen, que representa a ambos pilotos.
Allen tiene a su cargo la representación gratuita de David López Alfonso, de 39 años, e Ismael Hernández Chirino, de 28, quienes llegaron a Cayo Hueso en un arriesgado vuelo desde Tarará, en La Habana, el pasado 25 de marzo. Los dos pilotos de parapente permanecen detenidos en el Centro de Transición de Pompano Beach, en el condado Broward.
Según el abogado, las entrevistas ante un funcionario de asilo se extendieron por más de tres días y ocuparon casi 10 horas de interrogatorio a sus clientes. El proceso de argumentación de “miedo creíble”, que es la antesala para consolidar la petición de asilo, terminó el pasado miércoles, justamente cuando sesionaba una ronda de conversaciones migratorias entre delegaciones de Cuba y Estados Unidos, en Washington DC.
“Creo que tenemos un caso fuerte y estoy muy satisfecho con el testimonio brindado por ellos en las entrevistas”, agregó Allen. “Ambos fueron suficientemente honestos y consistentes en sus declaraciones”.
La decisión sobre el procesamiento de sus respectivos asilos debe conocerse esta semana. El próximo paso sería presentar sus casos ante un juez de inmigración para validar la petición de refugio en Estados Unidos por motivos políticos.
“Las peticiones de asilo de ambos están preparadas para presentarlas ante un juez de inmigración, pero también tenemos listas otras mociones para ponerlos en libertad de manera expedita”, explicó Allen.
Tras la respuesta de USCIS, los pilotos pedirán ser puestos en libertad bajo palabra y esperan que el tribunal les otorgue derecho a fianza.
Allen considera que las reacciones del gobierno cubano y del oficialista Club de Aviación de Cuba, al cual pertenecían ambos pilotos, son elementos que refuerzan la reclamación de asilo.
En la ronda de conversaciones migratorias bilaterales sostenidas el pasado miércoles, la representación cubana culpó a Estados Unidos por estimular las salidas irregulares, y criticó el asilo político concedido al piloto Rubén Martínez Machado, quien escapó rumbo a Florida en una avioneta de fumigación desde Sancti Spíritus, el pasado octubre.
“La impunidad sobre acciones de esta naturaleza estimula actos ilícitos con consecuencias peligrosas y negativas para la seguridad aérea y la seguridad nacional de ambos países”, señaló una declaración emitida por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX) al término de las charlas en Washington.
Aunque no se mencionaron explícitamente los nombres de López Alfonso y Hernández Chirino, Allen cree que la declaración oficial cubana alude también al caso de sus clientes. Una fuente cercana a las conversaciones en Washington dijo a CiberCuba que el tema de los dos pilotos de parapente se mencionó por la parte cubana durante la jornada de negociaciones.
“Absolutamente”, aseveró el abogado, quien observó que las demandas del régimen cubano van a pavimentar el caso de asilo de los pilotos.
En un comunicado difundido tras la fuga, el Club de Aviación de Cuba, que preside el exespía René González, llamó a ambos pilotos traidores y "vulgares delincuentes", y reclamó la devolución inmediata del equipo ultraligero usado para escapar. El ala delta motorizado del tipo “Trike” prestaba servicios en el polo turístico de Playas del Este, en La Habana, en la modalidad de Deportes Aéreos.
“Está más que claro que dos pilotos que estaban bajo supervisión de una entidad controlada por un espía de la Red Avispa nombrado héroe por el régimen cubano, merecen asilo en Estados Unidos”, acotó Allen.
El abogado considera también como un antecedente positivo el asilo otorgado por un tribunal de inmigración al piloto Martínez Machado, el pasado febrero.
Allen ganó recientemente un complicado caso de asilo a favor de la activista cubana Yeilis Torres, quien fue interceptada en una balsa y enviada a la Base Naval de Guantánamo. Torres fue luego traída a territorio estadounidense y permaneció hasta el pasado marzo en el mismo centro de inmigración donde están ahora los dos pilotos.
En su larga experiencia como abogado de inmigración, Allen ha tenido a su cargo la defensa de numerosos casos de arribos insólitos desde Cuba como el que le ocupa ahora de los dos “balseros aéreos”.
Entre las llegadas espectaculares a Estados Unidos que le ha correspondido representar y ganarles asilo político se cuentan las de Sandra de los Santos, quien arribó dentro de una caja de DHL en un vuelo desde Bahamas a Miami en 2004; el polizón Yunier García Duarte, transportado en la bodega de un avión a Miami en agosto de 2019; y el surfista Pablo Mantilla, que atravesó el Estrecho de Florida en una tabla de kitesurf en mayo de 2022.
“Me parecen siempre impresionantes las maneras que encuentran los cubanos para escapar de la isla en busca de un futuro”, comentó Allen. “Ese es un reto adicional para defender su derecho a ser protegidos en Estados Unidos”.
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