Vídeos relacionados:
Activistas cubanos se organizaron para ayudar a una familia de la localidad Alonso Rojas, en el municipio Consolación del Sur, Pinar del Río, que vive en extrema pobreza y no recibe atención del gobierno, a pesar de que hay una persona con discapacidad mental y un anciano.
Raciel y su padre, Claro Luis Romane, viven en condiciones precarias, sobre todo tras la muerte de la madre del joven hace unos tres años.
Lo más leído hoy:
CiberCuba habló con Rosme Alonso Rojas, una de las personas que se ofreció para ayudar a esta familia, a la que conoce desde niña porque su abuela es vecina de ellos.
La joven contó que ahora mismo necesitan "de todo", fundamentalmente comida, medicinas y pañales para Raciel, porque se hace sus necesidades fisiológicas encima. Además, considera importante que los puedan ayudar a arreglar el televisor, el único entretenimiento del muchacho.
"Cualquier ayuda viene bien en estos tiempos", enfatizó, y facilitó su número de teléfono (+53 5 4239434), para que todos los que puedan o deseen ayudar se comuniquen directamente con ella.
Otros activistas han usado las redes sociales para denunciar el caso de esta familia y el primero que activó las alarmas fue una persona que se hace llamar "Pueblo Carnero" en Facebook.
El internauta no solo sacó a la luz las pésimas condiciones en que viven padre e hijo, sino que denunció el abandono institucional que sufren, sin la debida asistencia de trabajadores sociales y funcionarios del gobierno y el partido comunistas.
"Estas personas son seres humanos, son cubanos, son habitantes de este consejo popular, ellos no son animales para estar viviendo en estas condiciones", escribió en la red social, donde aseguró que nadie se ha preocupado por ellos.
En días recientes el anciano y su hijo fueron visitados por integrantes del proyecto "Rayitos de Esperanza", y junto al sacerdote católico Yosvel Rodríguez Ordaz, les entregaron ropas, dos colchones, un ventilador, comida y dinero.
"No es mucho, pero fue lo que pudimos recoger nada más que nos avisaron", dijo a CiberCuba uno de los integrante del proyecto.
Un video grabado tras la entrega de la ayuda muestra al anciano profundamente conmovido por el gesto de amabilidad de esos extraños, que irrumpieron en su hogar cargados de buenas intenciones.
El gobierno municipal de Consolación del Sur no ha respondido los mensajes enviados sobre este caso.
En medio de la actual crisis general que atraviesa Cuba, son cada vez más los casos de abandono institucional de familias, que viven en extrema pobreza o no tienen acceso a medicinas y servicios básicos, entre otros.
Desde que comenzó la pandemia del coronavirus en Cuba, cubanos de dentro y fuera del país se han organizado en disímiles proyectos, la mayoría de carácter comunitario, para entregar medicamentos y otros productos altamente demandados a aquellos que no tienen familia en el exterior o no reciben remesas.
Lejos de apoyar estas iniciativas, el gobierno persigue y criminaliza a quienes pretenden ayudar a cubanos necesitados y empobrecidos aún más con la aplicación de la Tarea Ordenamiento, que disparó la inflación y encareció la vida de los ciudadanos.
Archivado en: