El periodista cubano Abraham Jiménez Enoa denunció en la Cumbre de Ginebra por los Derechos Humanos y la Democracia la naturaleza represiva del régimen cubano que lo obligó a un exilio forzado.
Jiménez Enoa, exdirector de la revista independiente de periodismo El Estornudo, colaborador de medio internacionales como The Washington Post y Gatopardo, y autor del libro La isla oculta: Historias de Cuba, fue uno de los oradores de este importante evento anual, donde relató su historia familiar para explicar cómo el régimen cubano ha divido y esparcido el odio entre generaciones de cubanos.
“En una casa rodeada de fotografías de Castro y el Che Guevara escribí mis primeros artículos que intentaban sacar a la luz todas las zonas oscuras de mi país que habían estado ocultas durante más de 6 décadas”, dijo el periodista, quién confesó que no pudo estar presente en el entierro de su abuela, debido a la prohibición que pesa sobre él.
Asimismo, el joven periodista cubano denunció la forma en que el régimen cubano reprime y criminaliza el periodismo independiente, a partir de su experiencia particular.
“Mi vida diaria se convirtió en una de arrestos domiciliarios, secuestros, interrogatorios, cárcel, amenazas de prisión, interceptación de mis comunicaciones privadas, vigilancia constante y represalias contra mi familia y amigos”, contó sobre los prolegómenos a su salida de Cuba.
Por último, Jiménez Enoa, quien ahora reside con su esposa e hijo en Barcelona, mostró su deseo de que su “hijo sea y se sienta cubano, aunque no crezca allá. No permitiré que le quiten este derecho, como lo hicieron conmigo, mi país y mi familia”.
En septiembre pasado, Jiménez Enoa fue distinguido con el Premio Internacional a la Libertad de Prensa que entrega anualmente el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), por ser “una voz prominente y abierta dentro de la comunidad de medios de comunicación de Cuba”.
La organización explicó que el joven reportero es “una voz prominente y abierta dentro de la comunidad de medios de comunicación de Cuba, que brinda nuevas perspectivas sobre los desafíos para los periodistas independientes e informa sobre temas que rara vez cubren los medios estatales, incluido el racismo en Cuba”.
Asimismo, recordó la represión en su contra desde 2016, cuando formaba parte de El Estornudo, y dijo que la persecución arreció a raíz de su colaboración en The Washington Post y en Gatopardo.
“En 2020, agentes de la Seguridad del Estado desnudaron y esposaron a Jiménez, lo interrogaron durante cinco horas y lo amenazaron a él y a su familia por sus escritos sobre la vida en Cuba en su columna mensual del Washington Post”, explicó el CPJ.
“El persistente acoso y la censura obligaron a Jiménez a huir a España en 2021, donde actualmente vive exiliado”, subrayó la organización.
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