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Cientos de incendios que asolan el este de Canadá extendieron desde este miércoles nubes de peligrosa contaminación por gran parte del este de Estados Unidos, y este jueves, que persiste la situación, las autoridades emitieron advertencias sobre la calidad del aire en una amplia franja del país.
Grandes ciudades como Filadelfia, Washington y Nueva York se despertaron este jueves con niveles insalubres de contaminación atmosférica, un día después de que Nueva York registrara sus peores lecturas de calidad del aire en décadas, aseguraron los medios.
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Aunque se esperaba que las condiciones en algunas partes del noreste fueran mejores que el día anterior, el aire nocivo se extiende actualmente por una parte cada vez mayor del país.
En Nueva York, una neblina anaranjada cubrió el horizonte de la ciudad y envolvió monumentos emblemáticos como la Estatua de la Libertad.
Los zoológicos trasladaron a sus animales al interior de las instalaciones y los vuelos se han visto interrumpidos.
Otras localidades de EE.UU., incluidas amplias zonas del Medio Oeste y el Sur, también están bajo alerta.
El origen del humo es un brote de incendios en el este de Canadá, que han obligado a decenas de miles de personas a abandonar sus hogares.
Según la prensa, a primera hora de este jueves ardían unos 250 incendios descontrolados en el este del país, 150 de ellos en Quebec.
Las autoridades de las ciudades a ambos lados de la frontera advirtieron de la amenaza del humo, que ha obligado a algunas personas a ponerse mascarillas en un sombrío recordatorio de las condiciones pandémicas de los últimos años.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, avisó que este jueves se repartirán un millón de mascarillas entre los residentes.
"Se trata de una situación temporal. Esto no es Covid", dijo en rueda de prensa, donde añadió que los autobuses y trenes de la ciudad de Nueva York cuentan con sistemas de filtración de aire de alta calidad que los convierten en medios de transporte seguros.
En una gran parte de Estados Unidos se advirtió a la población que no haga ejercicio al aire libre y que minimice en lo posible su exposición al humo, ya que el aire plantea riesgos inmediatos y a largo plazo para la salud.
La Comisaria de Salud de Nueva Jersey, Judith Persichilli, subrayó el riesgo que supone la mala calidad del aire para los niños pequeños.
"Los niños corren un riesgo especial. Esto se debe a que respiran más aire en relación con su tamaño", dijo, y añadió que los medicamentos preventivos contra el asma y los inhaladores de rescate deben tenerse a mano.
En Canadá, por otra parte, el país se prepara para la peor temporada de incendios forestales jamás registrada.
Los expertos apuntan a una primavera más cálida y seca de lo normal como causa de esta tendencia y se prevé que estas condiciones continúen durante el verano.
En esta época, los han quemado ya más de 3.8 millones de hectáreas en Canadá, una superficie 12 veces superior a la media decenal para esta época del año.
Más de 600 bomberos estadounidenses fueron enviados a ese país para ayudar a las autoridades locales.
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