El dueño de una Mipyme en Cuba bajó el precio del aceite que vende en su establecimiento y pidió a otros empresarios de ventas minoristas que hicieran lo mismo que él, pensando “en los maestros, médicos y todos los trabajadores de nuestro municipio”.
“Nuestra Mipyme Ideal Don Diego les ofrece a todos sus clientes el pomo de aceite de 800 ml a $620 CUP por unidad. Nada de $800. Voy a luchar por bajar todos los precios a mis compañeros”, dijo en sus redes sociales Erislandy Contrera Mayor.
El empresario, “padrino” del municipio San Juan y Martínez en la provincia de Pinar del Río, lanzó un desafío a sus colegas, a los que preguntó en qué les podía perjudicar una bajada de precios en el aceite.
“¿Qué les pueda perjudicar? Hagan lo mismo, pensemos en los maestros, médicos y todos los trabajadores de nuestro municipio. ¡Ah!, y ojo con el pollo, que lo voy a bajar porque me da la gana”, avisó el propietario de Ideal Don Diego.
La botella de 900 ml de aceite de soya Nona Pepa, producido por una empresa colombiana de Cúcuta, tiene un coste aproximado de $2 dólares en tiendas minoristas de países de la cuenca del Caribe, como Venezuela o Colombia.
En su arranque “competitivo”, Contrera Mayor anunció a bombo y platillo que venderá la botella de 800 ml (100 ml menos) a 620 CUP, con lo cual su producto en el mercado cubano termina costando algo más de $3 dólares, al cambio del mercado informal ($1= 203 CUP).
El aceite de soya que venezolanos o colombianos compran por unos $2.22 dólares el litro, los cubanos lo terminan pagando a $3.75 (un incremento del 168%) en Ideal Don Diego.
Contrera Mayor, que en sus redes sociales se manifiesta como afín al régimen cubano, repite sus consignas y aporta su “granito de arena”, se ha convertido en todo un fenómeno y referente en las redes afines al oficialismo en Cuba.
Su publicación de Facebook fue replicada y comentada por el periodista oficialista Pedro Jorge Velázquez, desde la página de El Necio, celebrando las “muestras de agradecimiento” que le dejaron varios usuarios en los comentarios.
Creadas a la sombra del poder por familiares o testaferros de militares y dirigentes -y sin verdadera competencia-, muchas Mypimes cubanas siguen ejerciendo una política de precios abusiva, propia de capitalistas implacables que ostentan el monopolio de la importación, o tienen privilegios que no gozan aquellos que decidan emprender por su cuenta y riesgo.
Precisamente por ello, el régimen cubano se apresta en estos tiempos a celebrar la creación de Mypimes como si fuese el resultado de una apertura económica que la sociedad civil denuncia como una tapadera para negocios de una oligarquía naciente, que sigue manteniendo la misma dinámica rentista y monopolista de la economía dolarizada en manos estatales, además de no contribuir a la creación de riqueza por dedicarse mayoritariamente a la importación y reventa.
Desde el Alto Representante de la Unión Europea, Josep Borrell, hasta la Embajada de Estados Unidos en Cuba, son muchos los actores internacionales que celebran una estrategia del régimen cubano para aparentar cambios en su modelo económico, desoyendo los avisos de la sociedad civil cubana que alertan que estas empresas forman parte de un entramado económico supeditado al aparato político-militar, con el cual el régimen busca acceso a financiación internacional y legitimidad para perpetuarse en el poder.
Como parte de esa estrategia, en Cuba empiezan a verse movimientos inusuales que buscan promocionar la imagen de unas Mypimes que resultan sospechosas para muchos cubanos y que la mayoría considera que son “negocios para ricos”, que no hacen sino acentuar la desigualdad creciente en el país.
Entre esos movimientos, la prensa oficialista cubana sorprendió recientemente al incluir su primera publicidad comercial, pagada por una empresa privada. Un publirreportaje publicado por Cubadebate y patrocinado por Cubamodela alabó la creación de esta Mipyme a la que su joven fundador considera un "Amazon cubano".
Desde el noveno piso del edificio Focsa, donde tiene sus oficinas, la empresa de Alejandro Peñalver Mauri se convirtió en el primer caso de inclusión de publicidad comercial pagada por una empresa privada en la prensa comunista cubana, un hito conseguido gracias a la reciente aprobación de la nueva Ley de Comunicación Social, y a la esfera de relaciones de sus familia y de sus padres, altos funcionarios del régimen.
Otro caso parecido y reciente, fue la publicidad gratuita ofrecida por el coordinador nacional de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), el ex espía Gerardo Hernández Nordelo, quien celebró la donación de una Mypime cubana a los damnificados por las inundaciones en el Oriente de Cuba, a pesar de ser de botellas de jugo de mango; fruta cuyas cosechas se pudren en esa región por ineficiencia de Acopio y otras empresas estatales.
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