El mercado inmobiliario en Florida se ha visto sacudido por un incremento notable en los precios de alquiler que pone en jaque a residentes y profesionales del sector.
Miami, Orlando y Tampa son las ciudades más afectadas por el incremento del precio de los alquileres de viviendas. Las subidas de la renta en estos territorios se sitúan entre el 15% y el 23% en los últimos años, según indicó Diario de Las Américas.
El aumento acelerado de los alquileres provoca a su vez una intensificación en la búsqueda de viviendas económicas, desencadenando una elevada competencia y provocando tensiones en el ámbito inmobiliario.
Los analistas apuntan a varios factores desencadenantes de este ascenso de los alquileres, entre ellos, el incremento en la demanda habitacional y una oferta limitada.
El crecimiento poblacional de Florida, marcado por la llegada de inmigrantes de distintos país, sumados a la preferencia de muchos propietarios por vender en lugar de alquilar sus inmuebles, han contribuido a este desbalance.
La pandemia y el auge del teletrabajo también han jugado un papel determinante, provocando que las personas busquen zonas residenciales acordes a sus necesidades laborales remotas, estimulando así la competencia por inmuebles disponibles.
Las autoridades han valorado una serie de medidas para paliar la crisis habitacional, incluyendo incentivos fiscales y programas de vivienda asequible.
Los colectivos de inquilinos instan a una intervención gubernamental efectiva que limite los aumentos de renta y asegure la permanencia de la población de menores recursos en sus comunidades.
Muchas familias han decidido que no pueden esperar que el gobierno tome cartas en el asunto y han comenzado a emigrar hacia otra ciudades de Florida o incluso a otros estados, buscando un costo de vida más asequible.
Hace pocos días, un operador de una compañía de mudanzas dijo que nota el éxodo debido a la inviabilidad económica de permanecer en la ciudad. Y es que, incluso con ingresos considerables, muchos residentes hallan insuficiente sus finanzas para afrontar los alquileres actuales de Miami.
Por otra parte, Hialeah ha impuesto medidas para restringir el uso de vehículos recreativos como alquileres de vivienda, asegurando el cumplimiento de la ley y atendiendo las quejas de vecinos que reclaman por el orden comunitario.
El gobierno dijo que se ha visto obligado a actuar por las denuncias que reciben debido a la presencia de arrendatarios con comportamientos no adecuados en áreas residenciales, donde las casas rodantes se están usando para lucrar.
La Ciudad que Progresa anunció a finales de enero que impulsará un proyecto de viviendas asequibles para contrarrestar la escalada de rentas, dando respuesta a la apremiante necesidad habitacional de sus ciudadanos.
Este dinamismo en las políticas de vivienda representa una luz de esperanza para aquellos que enfrentan la difícil tarea de hallar un hogar en un mercado inmobiliario cada vez más exigente y costoso.
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