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San Vicente y las Granadinas donará 235 toneladas de harina a Cuba, en medio de la crisis alimentaria generalizada en la nación caribeña, donde el régimen enfrenta dificultades para completar la canasta básica de la población, sobre todo con graves afectaciones en la distribución del pan normado.
Una nota de la agencia oficialista Prensa Latina señala que el cargamento llegará al puerto de Mariel en los próximos días.
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El donativo salió del país sanvicentino este lunes y fue despedido en un acto donde estuvieron el embajador cubano designado en este país, Carlos Ernesto Rodríguez, la canciller de San Vicente y las Granadinas, Keysal Peters, y el director general del Grupo de Empresas del Caribe Oriental, Robert Cato, destaca una nota emitida por la embajada cubana en ese país.
Rodríguez, en representación del gobierno cubano, agradeció el gesto “solidario y humanitario” de la nación caribeña, así como “recordó que pone de manifiesto una vez más la sólida relación de hermandad existente entre ambas naciones y el compromiso de seguir fortaleciéndolas”, señala Prensa Latina.
Treinta años cumplen las relaciones entre Cuba y San Vicente y las Granadinas, las cuales han tomado un impulso con la visita del gobernante Miguel Díaz-Canel a la isla en diciembre de 2022, como parte de una gira por países caribeños, y recientemente en marzo de 2024, a propósito de la VIII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que tuvo por sede a Kingstown, capital de ese país.
Precisamente, desde su cuenta en la red social X, el designado mandatario agradeció al primer ministro Ralph Gonsalves por la donación y se refirió al embargo de Estados Unidos a Cuba, su principal justificante de la escasez y la crisis en el país.
A finales de febrero, autoridades del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL) anunciaron que hasta finales de marzo habrá severas afectaciones en la entrega del pan de la canasta familiar normada por retrasos en la llegada de cargamentos de trigo.
“Restricciones financieras asociadas básicamente con el recrudecido bloqueo y las limitaciones logísticas que sufre Cuba para traer trigo desde mercados lejanos son las causas esenciales del retraso en el arribo de barcos con el cereal”, explicó un reporte del Noticiero Nacional de Televisión (NTV).
No obstante, el arribo de un barco al puerto de Santiago de Cuba, a mediados de marzo, con 8,300 toneladas de harina de trigo ayudaba a estabilizar la producción de pan de las provincias desde Ciego de Ávila hasta Guantánamo, según reveló la Agencia de Cubana de Noticias (ACN).
Una semana antes había llegado otro barco con trigo por el puerto de Cienfuegos, que aunque no va a garantizar el total del consumo de la producción de pan, permitiría una recuperación paulatina de los atrasos para el occidente y centro del país.
A pesar de la llegada de barcos con harina de trigo el régimen mantiene la utilización de extensores en la elaboración del producto hasta en un 15 por ciento, lo que ha llevado a tomar alternativas con productos como la yuca o la calabaza.
Aun así, los cubanos tienen que hacer enormes colas para comprar el pan de la cuota básica, como ocurrió en un reparto de la ciudad de Guantánamo.
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