Las relaciones entre Venezuela y Cuba serán revisadas por el gobierno de la nación sudamericana, en caso de que gane el candidato de la oposición Edmundo González, las próximas elecciones presidenciales.
“Hay que revisar las relaciones con Cuba, porque no es solamente el tema del SAIME (Servicio Automatizado de Identificación Migración y Extranjería), el tema de los puertos y aeropuertos, de la cedulación, de los servicios de inteligencia, en fin, ahí hay un amplio abanico de cooperación que tendrá que ser revisado a la luz del momento”, dijo González en una entrevista realizada por la Voz de América.
Las palabras del contendiente de Nicolás Maduro, el actual presidente que aspira a reelegirse en el cargo por segunda ocasión con apoyo de los servicios secretos del régimen cubano, deben caer como preocupación para los dirigentes de la Isla.
Sin embargo, Edmundo González aseguró que las relaciones de su país, bajo su hipotético mandato serán con todas las naciones del planeta.
“Nosotros vamos a tener relaciones con todos los países del mundo, unas relaciones en paz y respeto y a los intereses del país; no bajo intereses ideológicos”, aseguró dejando la puerta abierta para dialogar con los gobiernos autoritarios de la región, como Cuba, Nicaragua, e incluso traspasando esos marcos.
También se refirió a un proceso de transición entre el actual gobierno y el suyo, si se produjera la victoria de la banda opositora, y especificó sobre “ofrecer todas las garantías que tengamos que ofrecer para que aquí haya una transición en paz y con seguridad”.
Asimismo, el candidato se mostró, junto a su equipo, “muy confiados en que vamos a adelantar un cambio profundo en Venezuela, que vamos a reinstitucionalizar el país, vamos a recuperar la democracia y vamos a establecer un gobierno para todos y donde todos quepan. Que llegue el reencuentro de los venezolanos y el retorno de todos los venezolanos que viven en el exterior”.
Edmundo González fue designado candidato unitario de la oposición venezolana hace apenas un mes, tras la inhabilitación de María Corina Machado, una figura prominente en la política, imposibilitada para ejercer cargos públicos durante 15 años tras un dictamen de la Corte Suprema en enero.
No obstante, Machado ha estado al lado del candidato e inclusive ha participado en actos de campaña en los que no se ha podido presentar él.
Por su parte, recientemente la Organización de Estados Americanos (OEA) presentó el séptimo informe anual del Instituto Casla, encargado de compartir con Latinoamérica las lecciones de democracia y economía que pueden sacarse de la transformación de los países ex comunistas de Europa del Este.
Ese estudio, elaborado por expertos internacionales independientes, denuncia la asesoría cubana en la maquinaria represiva de Venezuela y solicita a la Corte Penal Internacional que investigue su intervención y participación en la comisión de crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Los resultados de esas investigaciones llegan en momentos en que ambos regímenes han tenido asiduos acercamientos. El primero, durante la visita del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel a Venezuela a propósito de la cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
El segundo fue durante una visita oficial a la Isla del canciller venezolano Yvan Gil Pinto, al que le aseguró que Cuba mantendrá "la cooperación con Venezuela mientras ustedes la necesiten".
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