La investigación sobre el asesinato del pediatra cubano Rafael Piorno Fermoselle, encontrado maniatado y con varias puñaladas en su domicilio de Aguadulce, en Almería, avanza con discreción de manos de la Guardia Civil, que hasta el momento maneja dos hipótesis.
A pesar del hermetismo que rodea el caso, las autoridades españolas están enfocadas en dos principales hipótesis que podrían esclarecer lo que consideran un "homicidio planificado" que conmocionó la semana pasada la comunidad de Roquetas de Mar, informó el diario Vox Populi.
La primera sugiere que el médico pudo haber sido víctima de una trampa mortal, y los investigadores creen que conocía a su agresor. Esta teoría se apoya en el hecho de que la cerradura de su vivienda no estaba forzada, y el sistema de alarma no se activó durante el ataque.
Además, los vecinos no reportaron haber escuchado ruidos sospechosos en las horas cercanas al crimen. Estos detalles hacen pensar que Piorno Fermoselle abrió la puerta de su hogar de manera voluntaria, probablemente porque esperaba la visita de alguien que conocía o con quien había concertado una cita.
La segunda línea de investigación explora la posibilidad de que el móvil del asesinato esté relacionado con los negocios personales del pediatra. A pesar de haberse jubilado, el médico seguía atendiendo a sus pacientes en su casa y había puesto su vivienda en venta, lo que lo ponía en contacto con diversos posibles compradores.
Este aspecto ha llevado a los investigadores a revisar cuidadosamente su entorno y sus últimos movimientos, así como a analizar su dispositivo móvil para identificar a posibles sospechosos.
El crimen, ocurrido en circunstancias inusuales, generó una gran conmoción en Roquetas de Mar, donde el doctor Piorno era ampliamente respetado por su dedicación a la medicina y su compromiso con la comunidad.
Originario de Santiago de Cuba, Piorno se graduó en Cirugía Ortopédica y Traumatológica en la Universidad de La Habana antes de trasladarse a España hace más de dos décadas, donde ejerció en el sector público de la salud.
Fue encontrado en su vivienda la semana pasada luego de que un vecino notara su ausencia y se acercara a la puerta de entrada, donde vio una mancha de sangre y llamó a las autoridades.
Al entrar, los agentes constataron que el doctor estaba maniatado y tenía tres puñaladas en su cuerpo.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: