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Organizaciones de derechos humanos lanzaron una campaña internacional urgente para exigir la liberación inmediata de Ernesto Borges Pérez, exoficial de inteligencia cubano que permanece encarcelado desde 1998 por intentar denunciar una red de espionaje del régimen cubano.
A un mes de la fecha contemplada para su excarcelación, prevista para el 24 de abril de 2025, activistas temen que el gobierno de Miguel Díaz-Canel intente extender su condena mediante la fabricación de nuevos cargos.
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La iniciativa es promovida por ‘Presos por lo Político en Cuba’ (@PresosCuba) y ‘Cuba Decide Washington DC’ (@CubWashingtonDC), y tiene como objetivo visibilizar un caso que consideran emblemático del castigo sistemático a la disidencia dentro del sistema cubano.
A través de una petición publicada en Change.org, materiales gráficos y audiovisuales, así como un reloj de cuenta regresiva hacia la fecha de liberación, los organizadores buscan ejercer presión nacional e internacional para impedir un nuevo atropello.
Ernesto Borges era capitán de la Dirección General de Contrainteligencia del Ministerio del Interior cuando fue arrestado en junio de 1998, a los 32 años.
Su "delito" fue intentar entregar a diplomáticos estadounidenses una lista de 26 espías cubanos infiltrados en Estados Unidos y países de la OTAN. Nunca llegó a consumar la acción, pero fue condenado inicialmente a pena de muerte, luego conmutada a 30 años de privación de libertad.
Desde entonces, ha pasado más de un cuarto de siglo tras las rejas, bajo condiciones extremas. Estuvo confinado durante diez años en celdas oscuras y sin ventilación, ha sido privado sistemáticamente de asistencia médica y lleva más de 20 años sin poder abrazar a su hija.
Su salud es precaria: padece cataratas avanzadas que le han dejado prácticamente ciego, sufre de una hernia inguinal que requiere cirugía urgente y presenta un deterioro físico alarmante.
“El caso de Ernesto representa no solo una injusticia prolongada, sino una advertencia para cualquier cubano que intente actuar con conciencia dentro del sistema”, señaló uno de los coordinadores de la campaña. “El régimen castiga con saña a quienes no se doblegan. Tememos que, ahora que se acerca la fecha de su liberación, intenten fabricarle nuevas causas para prolongar su encierro indefinidamente”.
La campaña también denuncia que el trato recibido por Borges contrasta con el que el régimen ha ofrecido a espías convictos que cumplieron prisión en Estados Unidos, como los llamados "Cinco Héroes", quienes fueron liberados y recibidos como figuras de Estado.
En cambio, Borges, que intentó impedir un acto de espionaje, ha sido condenado al olvido, el aislamiento y el sufrimiento.
Activistas subrayaron que, según las propias leyes militares cubanas, Borges ya habría cumplido más de una tercera parte de su sentencia, lo que permitiría su liberación anticipada. Sin embargo, las autoridades se han negado reiteradamente a revisar su caso.
“Cada día cuenta”, insistieron los promotores de la campaña, quienes llaman a la sociedad civil cubana, a los medios independientes, a las organizaciones de derechos humanos y a ciudadanos solidarios a compartir su historia usando las etiquetas #FreeErnestoBorges, #LibertadParaErnestoBorges, #HastaQueSeanLibres y #Todos.
El llamado es también a la comunidad internacional, para que observe de cerca este caso en las próximas semanas. “La libertad y la vida de Ernesto Borges están en juego. Es ahora o nunca”, concluyeron.
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