Un youtuber español, que se presenta como “cazador de tesoros, aventurero y divulgador de historia”, vivió una experiencia inolvidable en Baracoa, Guantánamo, donde fue testigo directo de una técnica local de extracción de oro que lo dejó sin palabras.
El visitante —cuyo canal de YouTube está dedicado a la detección de metales, exploraciones arqueológicas y rescate de objetos históricos— viajó a la zona oriental de Cuba atraído por los rumores de que en los ríos de la región todavía se encuentran pepitas de oro.
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Lo que no imaginaba era que terminaría participando en una jornada completa de minería artesanal junto a locales que usan un método totalmente empírico, pero altamente funcional.
“¡Nunca en mi vida había visto algo así!”, comentó con asombro en el video publicado en su canal, donde documenta la experiencia. Durante más de tres horas caminó por las montañas hasta llegar al sitio donde un grupo de baracoenses trabaja extrayendo oro de forma manual, con la ayuda de un artefacto al que llaman simplemente “el carrito”.
El “carrito”, que es como le llaman, no es más que una mecedora inclinada, hecha de maderas livianas, sujeta con barras metálicas, colocada sobre un cauce de río, que permite lavar la tierra y separar las partículas pesadas como el oro del resto del sedimento.
Recuerda, de alguna manera, a un objeto similar al que se emplea para dormir a los niños pequeños. En uno de los extremos, el que está más cerca del suelo, una ranura por donde se va el agua con todo aquello que no es oro.
A través de cortes hechos en troncos y estructuras improvisadas, el agua fluye canalizada, atrapando los fragmentos dorados en pequeñas grietas de la propia madera.
“¡Tengo que hacerme uno cuando vuelva! ¡Esto funciona de verdad!”, exclama emocionado mientras manipula la estructura junto a los mineros cubanos.
“No es ciencia espacial, es pura sabiduría popular”, comentó mientras observa cómo, tras cada sacudida del río, aparecen pequeñas pepitas doradas entre el barro.
El video muestra varios momentos en los que el español participa activamente en la jornada, llenando sacos, lavando tierra, e incluso intentando usar su detector de metales de última generación, aunque pronto admite que el método artesanal cubano es más efectivo en esas condiciones.
“Olvídate del detector… mejor sigo con el carrito”, bromea.
En medio del entusiasmo, reflexiona también sobre el esfuerzo físico que implica esta actividad: “Estoy congelado y agotado, pero esto es una pasada. ¡Mira cuánto oro sacan en un solo lavado!”.
En otro momento exclama: “¡Eso es oro real, y lo están sacando así, con madera, piedras y agua! ¡Increíble!”.
La técnica del carrito, aunque rudimentaria, forma parte del conocimiento colectivo de muchas comunidades rurales de Cuba, especialmente en zonas como Baracoa, donde la minería artesanal aún sobrevive como medio de sustento.
En ausencia de tecnología sofisticada o inversión industrial, los locales han desarrollado herramientas propias, adaptadas al entorno natural.
A lo largo del video se aprecia también la camaradería entre los cubanos y el extranjero, que se suma con humildad al trabajo y muestra admiración genuina por la destreza de sus anfitriones. “Aquí se gana dinero con esto, con su sudor y con su ingenio”, reconoce el youtuber.
La experiencia finaliza con el hallazgo de varias pepitas visibles y el compromiso del español de replicar la técnica en sus futuras exploraciones.
“Esto lo tengo que probar donde vivo. Me llevo esta idea conmigo para siempre”, concluye.
En su video, el youtuber español optó por censurar los rostros de los cubanos que se dedican a la minería artesanal, una actividad que el régimen considera ilegal en Cuba.
La policía de Santa Clara desmanteló en marzo pasado un campamento ilegal de minería ubicado en el kilómetro 7 de la carretera Maleza.
Según informó en Facebook el vocero oficialista Henry Omar Pérez, la operación permitió la detención de dos personas y la incautación de herramientas y equipos empleados en la extracción de oro y otros minerales, entre ellos un molino.
También ese mismo mes, las autoridades cubanas detuvieron a ocho personas en el municipio de Jobabo, provincia de Las Tunas, por presuntamente dedicarse a la extracción y tráfico ilegal de polvo de oro.
El Gobierno Provincial del Poder Popular de Las Tunas informó en Facebook que la operación fue ejecutada por fuerzas de investigaciones y del orden interior, tras denuncias previas de la población y controles realizados por las autoridades gubernamentales y del Partido.
Preguntas frecuentes sobre la minería artesanal en Baracoa, Cuba
¿Qué es el "carrito" utilizado en la minería artesanal en Baracoa?
El "carrito" es un artefacto ingenioso utilizado por los mineros artesanales en Baracoa, Cuba, para extraer oro de los ríos. Consiste en una mecedora inclinada hecha de maderas livianas y barras metálicas, que se coloca sobre un cauce de río. Esta estructura permite lavar la tierra y separar el oro del sedimento gracias a la canalización del agua que atrapa las pepitas doradas en pequeñas grietas de la madera.
¿Por qué el método artesanal cubano es preferido sobre los detectores de metales?
El método artesanal cubano de extracción de oro es preferido en Baracoa porque, en las condiciones específicas de los ríos locales, resulta ser más efectivo que los detectores de metales modernos. Esto se debe a que el "carrito" permite una separación directa y eficiente del oro del sedimento, aprovechando el flujo natural del agua para concentrar las partículas doradas.
¿Qué impacto tiene la minería artesanal en las comunidades rurales de Cuba?
La minería artesanal tiene un impacto significativo en las comunidades rurales de Cuba, especialmente en zonas como Baracoa. Esta actividad no solo es una fuente de sustento económico para muchos locales, sino que también forma parte del conocimiento colectivo y la tradición cultural. A falta de tecnología avanzada o inversiones industriales, los habitantes han desarrollado métodos ingeniosos y adaptados al entorno para aprovechar los recursos naturales.
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