
Puede que un día te apetezca comerte una buena pizza rebosante de queso, o quizás otro día tu apetito te pide una buena dosis de pollo frito crujiente, aunque si tienes ganas de ambos platos puede que caigas en la espiral de la indecisión.
Sin embargo, hoy en día ya es posible mezclar ambos sabores. La firma de comidas KFC ha sacado al mercado un nuevo ejemplar conocido como Chizza, un plato que combina ambos manjares y que ya se puede consumir en lugares como Filipinas y Singapur.
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