Sabido es que la crisis económica que viven los cubanos desde hace décadas ha resignificado una serie de términos que forman parte del cotidiano de vida de los ciudadanos de la Isla.
“Inventar”, “resolver”, “lucharla”, son algunos de los verbos que, tras décadas de permanente y sostenida crisis en el bolsillo de los cubanos, han adquirido nuevos y contundentes significados en la vida diaria.
Cierto es también que tras esos términos se esconden no sólo la natural cualidad emprendedora y resistente de los cubanos ―muchas veces adornada de cierta picaresca insular― sino también el hurto, el robo, la corrupción y delitos de todo tipo, cometidos a pequeña y a gran escala: desde el profesor que si puede hurta un paquete de hojas de su trabajo, hasta los desvíos económicos de gran magnitud.
En este reporte de Lente Cubano para Martí Noticias se entrevista a un grupo de guantanameros que opinan sobre esas pequeñas ilegalidades que muchos consideran “inevitables”, en tanto el salario no alcanza para vivir dignamente.
Con una economía sumergida y un gran porcentaje de recursos desviados al mercado negro, Cuba sigue navegando en el agua de la sobrevivencia a corto plazo, el día a día, con una inmediatez que muchas veces aplaza los sueños y las ilusiones por tiempo indefinido.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: