El mal estado de la viviendas y sus deficiencias se ha convertido en uno de los problemas más asfixiantes para muchos cubanos.
Pese a que en innumerables ocasiones el gobierno de la Isla ha prometido viviendas dignas y ha anunciado planes de remodelación y restauración de las mismas lo cierto es que el problema no presenta grandes visos de mejoría.
Deficiencias en la higiene, insalubridad, deterioro,e incluso derrumbes, son denunciados por muchos cubanos que relatan los peligros a los que se enfrentan cada día a causa de la mala situación de sus viviendas.
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